La censura

30 de julio 2025 - 03:08

Encuentro un facsímil de época pasada sobre la industria del cine y recuerdo que durante décadas, los periódicos españoles se hicieron eco en la cartelera con la calificación moral. Si la calificación era 2, la podían ver los jóvenes, las películas de 3 solo mayores, y 3R, para mayores “con reparos”, aptas solo para las personas de sólida formación.

Pero luego estaban las de 4, “gravemente peligrosas” para la moral. ¡¡Ay, las de cuatro!! Aquellas que hacían condenarse a los espectadores a las “calderas de Pedro Botero” salvo confesión. Si un espectador salía del cine después de haber visto “Gilda” o “La dolce vita”… y de regreso a su casa le atropellaba un coche, o se caía y se quedaba en el sitio, iba directo a las llamas del averno.

Cuando en mitad de los años 50, un periodista extranjero entrevistó al ministro dictatorial de Franco, Arias Salgado, ministro de Información y Turismo, y le recriminó la censura que se ejercía en España sobre el cine, éste le contestó: “Le voy a hacer una revelación: antes de que implantásemos estas nuevas normas de orientación, el 90% de los españoles iba al infierno”.

Ahora, gracias a nosotros, solo se condenan el 25% de la población española”. Si hacemos cálculos, después de tanta precisión, el cine condenaba en los años anteriores al franquismo a alrededor de 27 millones de españoles, mientras que gracias a la censura franquista, tan feroz siempre con el tema sexual, se había reducido esta cifra de los condenados al fuego eterno por obsesos y libidinosos a 7 millones y medio.

Es decir, casi 20 millones de españoles salvados gracias a la sencilla costumbre de no ver tetas ni escotes.

stats