¿El error del PP?

La manifestación sindical del pasado fin de semana ha sido la prueba más evidente del error cometido por el Pp y su presidente, el señor Feijoó. Y una demostración de que con miedo no se gana en política. Solo quedar en la sombra, donde lo dejaron los votos en julio del 23, y donde puede quedar en las próximas elecciones, si no despierta de su letargo político invernal. Otros, con mayor predicamento desde el Madrid de las cortes le han dicho a Núñez lo que suponen los errores en política. Es posible que no se haya enterado, debe ser nuevo, y acaba de bajar de su Galicia natal, todavía con los aromas de su terruño y de sus explicaciones ante las madres que querían y quieren que a sus hijos se les eduque en español; olvidados los años al frente de una buena labor que tuvo en Correos.

El personal que lo tiene que hacer presidente de todos los españoles, viendo al Feijoó actual, le recuerda demasiado a otro gallego que hace unos años era presidente del gobierno, y que, tras una importante mayoría absoluta, se dedicó a tenerle miedo a las leyes puestas por Zapatero y no derogó ni una, que digo una, ni media, ni reformó las más importantes. Para qué, se debió decir, si estos tragan con todo. Baste decir, a la hora de tragar, que venimos tragando las leyes de Pedro, o de Iglesias y la señora de Galapagar, sin rechistar, sin una manifestación que les diga a estos zampabollos, lo que pensamos los españoles de las mismas. ¿Y todo por qué? porque se entiende que en este país las quejas, las manifestaciones las hacen los sindicatos, y claro, cómo le iban a hacer CCoo y Ugt una a los que les están dando el bollicao de cada mañana, la manifestación se la hacen a la oposición, al Pp del gallego Feijoó, con un par, que no se sabe si sube o si baja de la escalera.

Fue oír lo de la mani de los sindicatos, y el Pp se acojonó, tal y como suena. Tienen un miedo a lo que les pueda decir la izquierda y sus altavoces, que a votar lo que diga Pedro el grande. La mani se celebró, y ¿cuántos ciudadanos fueron? si nos atenemos lo que dijo el propio delegado del gobierno en Madrid, unas quinientas personas, los que estuvieron en la misma y los contaron, no había más de doscientas. ¿Dónde estaba ese miedo a los jubilaos? Una vez más, y van centenares, los del Pp no saben dónde tienen que poner los huevos, y las cestas o se quedan vacías, de huevos, o acaban todos peleaos y rotos.