Níjar

La 'reforma y contrarreforma' de la Iglesia de La Anunciación, de la Villa de Níjar

  • La comunidad católica de la Villa de Níjar clama por la recuperación, en su estado original, de la espadaña de su templo

La Iglesia de La Anunciación, de la Villa, vista desde la parte trasera

La Iglesia de La Anunciación, de la Villa, vista desde la parte trasera / Diario de Almería

La Reforma rompió la unidad cristiana en Europa occidental y creó, al lado de la Iglesia Católica romana, otras confesiones cristianas conocidas con el nombre genérico de Iglesias Protestantes. Pero la Iglesia percibió que era necesario emprender una reforma interna para rescatar el terreno perdido ante los protestantes e impulso la Contrarreforma a mediados del XVI.

La reforma y contrarreforma en la Iglesia Parroquial de Santa María de la Anunciación es de otro tipo. También son causa y efecto, pero tienen que ver con la espadaña donde se ubicaba la campana y el reloj de esta Iglesia Fortaleza construida por mandato del obispo Antonio Corrionero en el siglo XVI y ubicada en la Plaza de la Glorieta de la Villa de Níjar.

“Era una espadaña en forma de campana y en ladrillo árabe”, recuerda Josefa Montoya, una de las muchas feligresas, y también vecinos, que claman por la recuperación de este elemento arquitectónico con su estado originario. “ El armazón de hierros de ahora es feísimo”, comenta esta misma interlocutora en comunicación con Diario de Almería. José Rodríguez Bonilla, cura-párroco de esta Iglesia de la Anunciación refuerza las palabras de esta feligresa y valora su estado actual. “Quitar la espadaña y poner cuatro hierros no tiene nombre”, señala a esta rotativo.

La Asociación de Vecinos del Casco Antiguo de la Villa de Níjar se ha hecho eco del malestar general en la comunidad religiosa nijareña, y también de otros vecinos que no participan en este mismo día a día, y ha dado traslado a este sacerdote, en varias ocasiones, de la petición para que la espadaña sea recuperada y devuelta como fue y estaba antes de las obras de rehabilitación.

Estos trabajos descubrieron un fresco en una de las paredes del interior del templo, pero despojaron al conjunto del edificio de su espadaña, que lo coronaba. ”Nos dijeron que la tenían que quitar porque corría peligro. Peleamos mucho para que no la quitaran, pero finalmente lo hicieron”, recuerda. “Fue un 19 de marzo. Lo recuerdo bien porque ese es el día de mi Santo”, comenta Josefa Montoya.

La espadaña en cuestión es posterior a la construcción del templo. El reloj es el original y fue cambiado de lugar en la ‘reforma’ de 2005. José Rodríguez Bonilla ejerce el sacerdocio al frente de esta parroquia desde septiembre de 2014. No estaba entonces, pero ha recabado información de lo ocurrido. “ No fue una reforma sino una deformación”, valora. Y añade: “La espadaña es algo más que un elemento arquitectónico.

Es algo muy significativo y representativo de un gran belleza”, asegura. Josefa Montoya participa de la opinión de su cura-párroco y va más allá sobre esta espadaña. “Es muy estratégica. De hecho se ve y puede ver desde todos los sitios del municipio. No hay ninguna construcción que la tapa”, abunda. La declaración del casco viejo de la Villa de Níjar como uno de los Pueblos Más Bonitos de España y su inclusión dentro de esta red nacional es el momento adecuado para recuperar este pináculo con su estado original, a juicio de esta nijareña.

El Ayuntamiento de Níjar, con Esperanza Pérez, su alcaldesa, al frente, está por labor de este proyecto de recuperación. La primera edil ha dado traslado al Obispado de Almería y a la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía del acuerdo plenario, de finales de enero de 2018, por el que la Corporación local mostró sus disposición a devolver la espadaña a la fachada de este Iglesia cuando disponga del placet de estas dos instituciones.

La Torre de esta Iglesia Fortaleza está declarada como Bien de Interés Cultural ( BIC), circunstancia que obliga a la solicitud de los correspondientes permisos. El mantenimiento del reloj y de su maquinaria le corresponde al Ayuntamiento. “Lo es en virtud de un acuerdo entre la Parroquia y el propio consistorio nijareño que viene de años”, comenta José Rodríguez Bonilla.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios