Cuenta atrás para 'colocar' a Maximiano

El mercado en España cerró el pasado 1 de septiembre, pero en clave Unión Deportiva Almería quedaron cosas en el aire. Sabiendo que Lucas Robertone (admitido por el propio Rubi) ya es uno más de la plantilla y que Ibrahima Koné se ha quedado sin ficha (el técnico comentó que hace trabajo específico por su cuenta) queda por solventar el futuro de Luis Maximiano. El detalle no es menor por cuanto de su salida en forma de traspaso (el cupo de cesiones está completo) depende que el club pueda inscribir a Aridane Hernández, llamado a comandar el eje de la zaga junto a Federico Bonini para frenar esa sangría de goles procedente particularmente de centros laterales. Hay una ficha libre de las veinticinco disponibles, pero el margen salarial sigue desbordado y de momento la LFP no ha dado luz verde.

La UDA no cumple a día de hoy la regla 1:1, norma del control económico de la Liga que permite a un club de fútbol invertir en fichajes y salarios deportivos la misma cantidad de dinero que consigue ingresar por ventas de jugadores o que libera por ahorro en su masa salarial. Ahí está el quid de la cuestión. La venta de Maximiano, con contrato hasta junio de 2029 y que posee uno de los salarios más altos del plantel, se antoja decisiva para desatascar la situación. Y el límite se agota porque el mercado al que apunta, Arabia Saudí, cierra este míercoles día 10 de septiembre. Una de las posibles opciones ya se ha caído, pues el Al Fateh, entrenado por el exrojiblanco Jose Gomes, finalmente se ha hecho para reforzar su portería con el también exrojiblanco Fernando Pacheco.

La otra alternativa es recalar en el Al Najma, recién aterrizado en la Saudi Pro League (primera árabe). El club tiene la particularidad de que está instalado en la región de donde procede la familia de Mohamed Al-Khereiji, actual presidente de la UDA, quien ha mostrado un fuerte interés por hacerse con la propiedad, según reportan medios saudíes. La operación lleva abierta ya varios días, el problema radica en que Maximiano no termina de ver claro marcharse a jugar a Oriente Medio con 26 años de edad, donde ya militan otros compatriotas como Cristiano Ronaldo o Joao Félix, porque puede ser visto como un paso atrás en su carrera deportiva. En la hipótesis de que se quedase, como Robertone, cortaría la progresión de Bruno Iribarne, al menos hasta el mercado invernal, pues se firmó a Andrés Fernández y Fernando Martínez renovó un año más.

En caso de no cuajar su salida, la UDA se vería en un serio aprieto para inscribir a Aridane. El acuerdo con el jugador canario (todo apunta que por un año con otro opcional en función de rendimiento o certificar el ascenso) en principio no peligra porque sabe que hay una ficha libre para él, pero de no salir Maximiano el club tendría que buscar otras soluciones más imaginativas. Una podría ser proceder a una ampliación de capital, algo que ya se efectuó en la etapa de Turki Al-Sheikh al frente de la propiedad por valor de 31 millones de euros y que también está sometido a unos controles por parte de la LFP.

Una tercera vía pasa porque Mohamed El Assy consiga en los próximos días un patrocinador fuerte para lucir en las camisetas (el acuerdo con DAZN el curso pasado se anunció el 9 de octubre) o incluso que logre una empresa interesada en el 'naming' del Estadio de los Juegos Mediterráneos al estilo del que ya se tuvo con la compañía de bebidas energéticas Power Horse, que expiró en junio de 2024, sin que desde entonces haya relevo. Con el equipo en Segunda este tipo de acuerdos se complican más porque el impacto publicitario para las empresas es menor. Una encrucijada que el club confía en resolver de la mejor forma posible para que Rubi tenga pronto a Aridane en el verde.