Carnes a la brasa y paella de la mano de Bernardo y Juan en el Rafael Andújar

Es el ambigú más nuevo de la capital, ya que fue reformado hace solamente unos meses tras hacerse cargo del mismo José Antonio Belmonte Gorri, dueño del bar La Salada en El Zapillo. El que fuese jugador de la UD Almería, lo ha dejado en buenas manos, en las de dos personas vinculadas al mundo del fútbol desde hace muchos años. Jugadores veteranos y con gran experiencia en el mundo de la hosteleria, Bernardo García y Juan Luque están sacando adelante un ambigú que ha dado vida al Rafael Andújar, tanto en días de partido como entre semana, ya que abren todos los días.

Entre sus especialidades destaca una gran variedad de carnes, cocinadas a la brasa o en plancha, y los domingo deleitan a los asistentes a los partidos con un sabroso arroz caldoso a mediodía. Llevan poco tiempo pero su negocio ya está creándose una fama que iguala a la de otros conocidos ambigús de la provincia almeriense. Bernardo y Juan no solo son compañeros, son amigos desde hace muchos años y transmiten siempre un buen ambiente que invita a pegarse a la barra y disfrutar de unas cervezas entre dos apasionados del balompié que son de sobra conocidos en dicho mundillo en Almería.

Su capacidad de trabajo no solamente se limita a los horarios de los partidos, también abren durante la semana a partir de las siete de la tarde aprovechando los alquileres de los campos y las numerosas visitas de sus conocidos. El ambigú del Rafael Andújar ha dejado de ser una simple barraca típica de campo modesto, aunque mantiene ese sabor a fútbol añejo con el que disfrutar de una buena cerveza y unas tapas de pincho, lomo o alitas de pollo, entre muchas otras. Como ocurre en la mayoría de los bares de los campos, uno se siente como en casa, con un trato cercano que ayuda a dejar la grada para ver el partido desde sus ventanales, disfrutando del olor de las ascuas y de una plancha que no para de cocinar. Y el domingo, como en muchas casas, día perfecto para un arroz.