La felicidad es la clave de su rédito

Camisa blanca, pantalón beis, zapatillas deportivas, su característica cresta y sonrisa de oreja a oreja. Es un tipo feliz. Además, ha tenido un hijo recientemente -de nombre como el padre- y tiene nuevo equipo. Es Thievy Guivane Bifouma Koulossa (1992, Saint-Denis, Francia), que ayer estaba como un niño con zapatos nuevos en su presentación con el Almería en la sala de conferencias del Mediterráneo. Tras presentarlo Alfonso -"es uno de los jugadores que más me ha impresionado" dijo-, el delantero franco-congoleño atendió a los medios de comunicación en un perfecto castellano.

"Ha sido un verano difícil, pero bonito porque ha nacido mi niño. Aparte del fútbol, la situación estaba difícil con el Espanyol. Me sentí incómodo allí, por lo que buscábamos una salida. El Almería es un equipo al que conozco desde mi época en Las Palmas. Aquí estoy con mi niño, en el sur. Tengo que trabajar para estar al 100%", fue lo primero que dijo el exariete del Espanyol, que se pasó cedido en el West Bromwich Albion inglés la segunda mitad del pasado curso.

Ahora recala en el Almería en la misma condición, aunque la entidad de la Vega de Acá se guarda una opción de compra. Otros equipos estaban interesados en él, incluso lo tuvo casi hecho con el Málaga. ¿Por qué la UDA? Thievy lo explica: "El Almería y el entrenador me han dado un buen trato. El grupo es bueno. ¿Por qué no Inglaterra o Málaga? Para estar bien tengo que estar feliz. Necesito estar feliz para crecer y aportar como jugador. En Las Palmas recibí mucho cariño y eso juega mucho". "No soy español, soy francés. Pero sé que hay mucha diferencia entre el norte y el sur. En el sur se come muy bien, eso es importante. La familia está cerca, tenemos una casa en Málaga", prosiguió.

A pesar de querer marcharse del Espanyol, que continúa siendo el equipo poseedor de sus derechos, el nuevo '9' rojiblanco no quiso hablar mal de los periquitos. "Hace un año que intenté irme del Espanyol. Le tengo un respeto al presidente y al club. No puedo escupir al club que me dio de comer. Me importan la familia, el entorno, el vestuario, el presidente; el resto no. Yo lo que tengo que hacer es trabajar", afirmó.

Thievy, que recordó en varios momentos los enfrentamientos entre el Almería y Las Palmas jugándose el ascenso hace dos temporadas, habló también sobre las noticias de medios catalanes acerca de su sanción por no realizar la pretemporada con el Espanyol (unos 3.000 euros por día ausentado). "Eso son mentiras de la prensa. Multa ninguna. Pero lo que dice la prensa allí en Barcelona no me afecta por nada. Sabemos todo que eso es mentira", comentó.

Mañana podría vestirse de corto y debutar como unionista ante el Córdoba: "Puedo jugar el domingo, depende del míster. No estoy al 100%, pero me falta poco". Eso sí, el objetivo que se marca es el sábado 23. En siete días la UDA se enfrentará a su exequipo. A diferencia del encuentro de vuelta, donde no podrá actuar por la cláusula del miedo, en casa sí podrá hacerlo. "Espero estar bien para la primera jornada, pero no puedo garantizarlo", afirmó.

El franco-congoleño se mostró a total disposición de Francisco en cuanto a su posición en el campo se refiere: "Personalmente, me gusta jugar más por el centro, pero estoy a la disposición del equipo. Si hace falta que juegue de central o de portero, lo haré". Por último, Thievy dejó clara su ambición. Quiere triunfar en el Almería. Eso sí, el fichaje estrella para este curso se mostró humilde: "Me gusta tener ojos puestos en mí. Es una presión buena. Pero no me siento superior a ninguno de mis compañeros o de ustedes. Aparte de futbolistas, somos personas. Sólo Dios esta encima de nosotros. El resto somos iguales".