Que todavía no se haya dado a conocer el nombre del nuevo inquilino del banquillo de la UD Almería no significa que la dirección deportiva tenga paralizados los movimientos para reforzar los puestos más débiles del actual plantel. Como siempre, el departamento encabezado por Mohamed El Assy con el asesoramiento de Joao Gonçalves trabaja en un listado con varios nombres por puesto que, tras consultar la opinión del futuro técnico, se irán transformando en refuerzos para el curso 2023-2024, el que se desvela como de asentamiento en Primera División.

Siendo el octavo equipo más realizador y el tercero más goleado es una evidencia por dónde van a pasar las necesidades para incrementar el nivel de la escuadra. La clara pretensión es armar un equipo más fuerte en el aspecto defensivo sin renunciar a la vocación ofensiva que caracterizan a los proyectos de Turki Al-Sheikh, declarado amante del fútbol ofensivo. 

Los hombres del presidente saudí han puesto el foco en afianzar el lateral diestro, quizá la demarcación que más quebraderos de cabeza haya ocasionado a Rubi durante la campaña recién finalizada. Ni Pozo ni Mendes han ofrecido las prestaciones defensivas necesarias, por lo que se hace vital incorporar al menos a un futbolista (tal vez dos en caso de que el próximo técnico prefiera a Pozo como extremo) que equilibre mejor la zona, lo que casi con total seguridad traerá consigo la salida de Mendes en calidad de cedido.

En el carril zurdo todo dependerá de si Sergio Akieme sale traspasado, ya que en el improbable caso de permanecer un año más en la disciplina rojiblanca el defensor madrileño tendría de nuevo como compañero de fatigas a Álex Centelles, que en la recta final de la competición experimentó un crecimiento exponencial al disfrutar de minutos por la lesión de Akieme. En el radar está Arnau Solá, firmado el verano pasado del filial del Barça y que este año ha cuajado una gran campaña a préstamo en el histórico Real Murcia y quizá sea el único de los nueve cedidos con opciones reales de entrar en el primer equipo.

En el eje de la zaga ocurre una situación bastante parecida. Los cuatro centrales, Ely, Babic, Chumi y Kaiky, tienen contrato en vigor (el de Ely es el que antes vence, en junio de 2024), pero la posibilidad de que el serbio sea vendido por el caché que tiene como flamante internacional podría abrir la puerta a incorporar a un central con perfil distinto a las torres actuales, que tenga más cintura y sepa desenvolverse mejor en espacios abiertos y a la espalda. Un sector de la afición suspira por el almeriense Joaquín, que acaba contrato en el Real Valladolid, pero a día de hoy no está claro que vaya a ser el elegido.

En la portería tanto Fernando Martínez como Diego Mariño lucharán a priori por la titularidad dada la llegada de un nuevo preparador con el que todos empezarán de cero, mientras que la incógnita está en ver si Diego Fuoli renueva como tercer guardameta o, en su defecto, la entidad opta por ascender a algún canterano desde las bases. 

En el centro del campo la necesidad más básica pasa por cubrir la vacante que dejará el capitán César de la Hoz tras cinco campañas como rojiblanco. El nombre que ha saltado a la palestra en las últimas horas es el de Gerard Gumbau, que se lució en el duelo ante la UDA en el Power Horse y acaba contrato tras el descenso del Elche, si bien un recién ascendido como el Granada y el Celta de Vigo también lo pretenden. Está por ver si es el perfil que gusta a la dirección deportiva o se decantan por una apuesta más exótica.

También será necesario cubrir el puesto que va a dejar libre Francisco Portillo, que ha actuado indistintamente en uno de los dos costados del ataque y en la mediapunta. Del mismo modo habrá que reemplazar a Dyego Sousa, a quien le resta un año de contrato pero con el que el club tiene previsto llegar a un acuerdo de rescisión más pronto que tarde. Su rol como tercera alternativa a El Bilal y Luis Suárez podría asumirlo Marko Milovanovic, que acabó el curso en el filial precisamente para abrirle hueco al ariete cafetero. 

Esas son las carencias que saltan a la vista para cualquier ojo entrenado, pero además habrá que ir cubriendo los huecos que vayan dejando las salidas previstas para hacer caja y poder ensanchar la base de crecimiento. Mercado tienen los citados Babic y Akieme, así como Lucas Robertone, Samu Costa, Largie Ramazani y El Bilal Touré.

Lo más probable es que más de uno de esos nombres acabe recalando en la Premier League inglesa, dejando en las arcas de la entidad una cantidad que servirá para acometer esos reajustes encaminados a dar un salto de calidad al plantel con la idea de no pasar apuros para lograr la permanencia y que el equipo empiece a pisar la zona tibia de la tabla clasificatoria antes de enfocar el prometido impulso europeo.