Juan Carlos Zumaquero, un malagueño de vuelta al banquillo de La Cañada

El 29 de marzo del presente año, en un choque frente al Calavera, el malagueño Juan Carlos Zumaquero (13 de marzo de 1987, Málaga) dirigía su último encuentro al frente de La Cañada en la División de Honor Juvenil antes de por decisión decidir poner a su etapa al frente de los cañaeros. Lo que entonces difícilmente podría llegar imaginar que tan solo unos meses más tarde iba a estar de vuelta para afrontar un nuevo periplo en tierras almeriense en el mismo banquillo que dejó tiempo atrás.

Una decisión que si para algunos podía llegar a extrañar, el técnico malagueño no duda en considerar que "volver a La Cañada fue bastante fácil" resaltando el cariño recibido. Un conjunto, el cañaero, al que llegó a ilusionar con la histórica posibilidad de disputar la Copa del Rey Juvenil, esa que por momentos vieron tan cerca teniéndola sumamente al alcance. Algo que, con los sucedido el pasado curso todavía muy presente, pretende que esta vez no se les vuelva a escapar, contando también en esta ocasión con el que fuera entrenador la pasada temporada del Rusadir en la División de Honor Juvenil, Abdellah, como segundo entrenador. Y todo ello sin olvidar las "ganas de volver a ilusionar a la gente de La Cañada, de volver poner el nombre de La Cañada en el plano andaluz".

Pregunta. ¿Qué balance hace de esta pretemporada que ya va tocando a su fin?

Respuesta. Al final hemos estado reforzando al equipo, sobre todo a nivel defensivo. Venía con una idea ofensiva de juego muy buena, con un juego combinativo muy bueno, jugadores que toman decisiones muy bien con balón. Fruto del trabajo del año anterior creíamos que habría que completar ese trabajo con ese trabajo defensivo para que sepan trabajar como un bloque, para que sean solidarios. Esto creo que la División de Honor siendo La Cañada es algo que es fundamental. Al final los rivales sí que tienen futbolistas firmados para jugar a ese fútbol que es la cantera, como el Betis, el Sevilla, el Málaga, el Almería, Granada. Estamos satisfechos con el trabajo de los chavales, si es cierto que queda camino. El grupo es nuevo, también se tienen que hacer a las ideas. El fútbol es un proceso y estamos en el proceso de que el equipo tenga una idea de juego y vayamos a todos a una.

P. Durante esta pretemporada incluso se han llegado a enfrentar a un rival de la talla del Villarreal en el Trofeo de Feria Juan Oncala. ¿Qué conclusiones saca de ese torneo y qué supuso poder enfrentarte a alguien de la talla de Pepe Reina en el otro banquillo?

R. Al final es un honor y es un disfrute. El estar en esta categoría hace que muchas veces te encuentres con este tipo de fenómenos, de referentes como es Pepe Reina, como es también Tomás Pina que estaba de segundo entrenador. Es un premio, es un premio al trabajo, yo lo considero un premio disfrutar de ese tipo de partidos. Hay que tener en cuenta que el Villarreal venía de jugar el año anterior en División de Honor Juvenil siendo La Roda, o sea que esa ventaja al final manifiesta. Nos quedamos con la parte positiva de ese partido donde el equipo desde el 28 hasta el 60 fue capaz de encerrar al Villarreal en su campo, presionando muy bien, ajustando bien la presión, imposibilitando jugar al Villarreal, hacer su fútbol. Extraímos mucha información de ese partido, mucha información que nos va a hacer ser mejores. La verdad es que el equipo dio un paso al frente porque al día siguiente se rehizo rápidamente y con el Almeria supo competir el partido desde esa carga física que algunos jugadores importantes tienen del día anterior, nos ajustamos en un bloque un poco más bajo, más compacto, esta vez con línea de cinco hicimos trabajo muy bien, hiciemos trabajar al extremo en ese primer tiempo Olvera porque Rafilla tiraba ese lateral por fuera muy profundo y Olvera tenía que defender por dentro en línea de cinco, cerrar esa línea para que el Almería no encontrase esos espacios. Y todo ese tipo de cosas, yo creo yo que nos han enriquecido como equipo, como cuerpo técnico y ha sido un buen paso más al frente para seguir compitiendo, puesto que los rivales van a ser de esa envergadura en liga.

Juan Carlos Zumaquero: "Al final tenemos a equipos que el año pasado estuvieron en el top-8 a nivel nacional"

P. ¿Puede asemejarse ese partido contra el Villarreal a lo que les tocará enfrentarse en el grupo a equipos como son el Betis, el Sevilla, el Málaga o el Granada, entre otros?

R. Al final tenemos a equipos como el Granada, el Málaga y el Betis, que son equipos campeón de España y cuartofinalistas de España, son equipos que el año pasado estuvieron en el top-8 a nivel nacional. La exigencia de jugar contra un Villarreal puede ser parecido a jugar con este tipo de equipos. La referencia nos viene bien no solo por el resultado, sino por saber qué necesitan nuestros jugadores, que aún no han debutado en la categoría División de Honor Juvenil que van a ser frente a jugadores del Betis, del Málaga, del Almería, que ya sí tienen partidos jugados en la categoría. Algunos una temporada, otros dos temporadas y eso conlleva ventajas, pues esa información nos lleva a saber qué tenemos que crear en los entrenamientos para intentar que esa desventaja sea la menor posible cuando empiece la liga ese día 14 de septiembre contra el Málaga.

P. ¿Qué valoración hace de la plantilla conformada? Contará con algunos jugadores que ya estuvieron a sus órdenes el pasado curso.

R. Valorar el esfuerzo del club por el hecho de traer a cuatro jugadores de fuera. El mediocentro Mady de Barcelona, el extremo derecho Ebrahima del Granada que viene cedido, también esa cesión de Nimocio de Roquetas, que no sale fuera de aquí, el delantero, la incorporación de Juan Campos que viene del Elche y la de Pedro que viene del Recreativo Bailén de jugar en categoría senior. La verdad es que son incorporaciones importantes de fuera, que el club hace un esfuerzo, el club apuesta porque el equipo sea competitivo en la categoría. También valorar que el grueso del equipo viene de jugar en Liga Nacional Juvenil, eso también te hace ser competitivo. Que el club tenga esas dos categorías, Liga Nacional Juvenil y División de Honor Juvenil te hace que no tengas tantas desventajas con esos jugadores que vienen d jugar en División de Honor. Y jugadores como son Iván González, el portero; Adrián Cárdenas, el central; Rubén Figueroa y Mario Polo que a vienen de dinámica del año pasado del División de Honor Juvenil, que me conocen ya y con ellos todo es más fácil. Conocen la categoría, tienen esa experiencia y yo creo que son los jugadores que tienen que aportar al resto esa experiencia, ese conocimiento y esa energía que la categoría requiere.

P. ¿Cómo se produjo su vuelta a La Cañada tan poco tiempo después de su salida?

R. Yo creo que volver a La Cañada fue bastante fácil. Estoy en un sitio donde me he sentido querido y donde cuando vine aquí a renegociar la situación para la vuelta la verdad es que cuando volví a mi casa de Málaga sentí lo mismo cuando entré por la puerta de mi casa y vi a mi mujer y mi hija. Lo que sentí en el club con su directiva, con su gente, con sus entrenadores. Sentí el mismo cariño y eso ha sido lo que ha hecho que yo vuelva a La Cañada, que vuelva a pelear por que este club siga en División de Honor Juvenil, porque creo que es un club de División de Honor Juvenil por su afición, por su directiva y por su dirección deportiva y por su gente. Este año estamos aquí, sí que me gustaría pelear por el mismo objetivo del año pasado puesto que estamos ilusionados por ello. Creo que el equipo va a poder competir contra cualquiera. Vamos partido a partido y el tiempo dirá por lo que peleamos.

P. Difícilmente se podría imaginar regresar a La Cañada tan pronto.

R. La verdad es que no me lo imaginaba. La verdad que es felicidad porque ya no es lo mismo. Ese proceso de adaptación a la ciudad y al contexto del club, a la idiosincrasia del club ya no me hace falta pasarlo. Los procesos se adelantan bastante, ya conozco al futbolista. La ventaja de este año es que se trabaja de una forma mucho más cómoda por conocer el contexto. Trabajamos todos en la misma línea, con muchas ganas de volver a ilusionar a la gente de La Cañada, de volver poner el nombre de La Cañada en el plano andaluz porque no solo será beneficioso para el club, sino también para los jugadores que como vimos el año pasado han dado un salto en su carrera, que La Cañada sea puente para esos chavales que quieren dar un salto profesional y que quieren vivir del fútbol, que seamos el puente para ellos.

P. Ejemplos de ello hay varios de la pasada temporada, siendo quizás el más significativo el de Salva Fillouche.

R. También Hilarion que ha vuelto al Cádiz. Venía de jugar en el Cádiz durante seis meses creo que 90 minutos y fue un jugador que dio un nivel en la categoría casi de Copa del Rey. Estuvo entre los mejores centrales, ha vuelto al Cádiz y ojalá este año sea como titular y lo veamos aquí en La Cañada. Quinn Mcnutt también ha salido al Jerez de los Caballeros en Tercera, Rubén Hernández también al Pulpileño en Tercera. Yo creo que no es un salto fácil. Eso es fruto del buen trabajo del club, del buen trabajo de la gente que está allí en el día a día. De la buena captación de jugadores también porque eso también al final nosotros no tenemos una varita mágica, necesitamos materia prima para mejorarla. Muy satisfecho porque al final el trabajo del entrenador no es solo obtener resultados, sino yo creo que en categorías base ayudar a estos chavales, a estos chicos que tienen ilusión, que pueden cambiar su vida con el fútbol a que tengan una oportunidad real.

P. Después de haberlo tenido tan cerca la pasada temporada uno de los objetivos será meterse en la Copa del Rey. ¿Cómo afrontan este curso?

R. Nosotros también hemos incorporado al cuerpo técnico a Abdellah. Entrenador la temporada pasada del Rusadir de la División de Honor Juvenil. Es tan clara que la intención es de competir cada partido. Ya en verano he estado viendo al Betis, que estuve en Cabra viendo al Betis, al Málaga y al Córdoba para saber en qué nivel estamos ahora mismo. Lo más importante es que el equipo creo que llega a la primera jornada, que va a ser competitivo. A estos niveles cualquiera te puede ganar, pero lo importante es que también cualquiera puedas ganarle.

P. ¿Cómo se produce la llegada de Abdellah como su segundo entrenador, contando ya con experiencia en la categoría tras dirigir al Rusadir?

R. Es cosa mía puesto que en 2016 hicimos juntos el curso de entrenador nivel 3 en Madrid, el título nacional. Ahí es donde hicimos una amistad tanto a nivel deportivo como a nivel personal. Es una insistencia mía, él ha pedido una excedencia en su trabajo, tengo que decirlo, para poder compartir conmigo esta experiencia. Lo que me va a aportar son muchas soluciones a nivel táctico, otra visión de fútbol distinta a la mía. Al final para que todos evolucionemos necesitamos distintos puntos de vista, aquí viene para ayudarnos en lo que se requiera y sobre todo a nivel táctico para que el equipo haga un salto de nivel.

"En eso estamos en aprender de lo que sucedió el año pasado y de que este año no nos vuelva a pasar"

P. ¿Cuál puede ser la clave para que este año no se escape el billete para la Copa del Rey Juvenil?

R. Desde el aprendizaje del año pasado encontrar esa columna vertebral, ese grupo de jugadores que le den al equipo el mismo nivel cada fin de semana o cada partido. Ese reparto de esfuerzos en el cuerpo técnico para que, como es mi caso, llegué a diciembre un poco mermado, un poco cansado puesto que la exigencia de la competición es muy alta. Repartir esfuerzos entre el segundo entrenador, el preparado físico y yo, el entrenador de porteros para llegar con las mayores fuerzas posibles a esa rectas finales de la pelea por la Copa del Rey que es en diciembre y mantener la excelencia en los entrenamientos diarios. Esto cada día, sin bajar el pistón, con todo eso también en la prevención de lesiones. Esto teniendo cuidado en que jugadores importantes no caigan puesto que el año pasado llegamos al mes de diciembre con jugadores muy importantes tocados como Romero, Papu y al final hizo que el nivel del equipo bajara un poco y no nos diera lo suficiente para jugar la Copa del Rey por una milésima, por un gol, por un centímetro. En eso estamos en aprender de lo que sucedió el año pasado y de que este año no nos vuelva a pasar.

P. En esta próxima temporada habrá una cita muy especial como será el encuentro frente a La Mosca, el que fuera su equipo en diversas etapas. ¿Qué supondrá esa cita?

R. Hay que decir que aún queda, creo recordar que es la jornada 8. Pero será un partido muy especial que viviremos todos, que disfrutaremos juntos. La verdad que ver a La Mosca también en la máxima categoría para mí es un privilegio. Y encima ver a jugadores a los que he entrenado cuando llegué de fuera. Esos jugadores que en cadete autonómico estaban prácticamente descendidos en la jornada 9 y que les dimos un impulso y que han pasado de eso a ascender y jugar en División de Honor Juvenil con el que fue miembro de mi cuerpo técnico antes de irme a China, con Alejandro Fernández que al final junto con el club es el partícipe de que La Mosca esté en División de Honor Juvenil. Un club donde desde el presidente hasta la directiva me tienen un cariño especial, la gente del barrio, va a un partido para mí para disfrutar, que al final competiremos cada uno con sus armas. Evidentemente todos buscaremos los tres puntos, pero donde intentaré disfrutar de lo máximo puesto que a lo mejor es la única vez en la vida que se me da.

P. Años atrás ya se enfrentó a La Mosca, pero siendo la máxima categoría juvenil será aún más especial.

R. Sí que nos enfrentamos estando con el Málaga, con el Cadete A, donde se ganó en casa 2-0 y en La Mosca 0-3. Recuerdo en ese partido en La Mosca al equipo le puse el objetivo de ganar el partido con portería a cero y haciendo un gol a balón parado, en estrategia que es el punto fuerte de La Mosca. Recuerdo ese gol del equipo a balón parado y como el equipo entero me lo dedicó. Fue algo bonito allí, será un momento muy especial para todos, para mi familia, para el cuerpo técnico de La Mosca seguro porque son amigos míos, Jaime, Vargas, Álex. Será algo que viviremos, que evidentemente durante el partido lo viviremos de forma intensa, cada uno defendiendo su interés desde la deportividad, cada uno buscando los tres puntos porque es algo que yo inculqué, que yo siempre inculqué aquí en La Mosca. Soy competitivo y es normal que nos quieran ganar, pero con mucha ilusión y no solo de jugar contra ellos, sino también de verlos en la categoría y de verlos competir porque estoy seguro que va a ser un equipo muy difícil de la categoría.

P. Durante este último verano se ha llegado incluso a valorar la posibilidad de crear una Superliga para la siguiente temporada, ¿qué le parece esta idea?

R. Sí que es difícil, sobre todo en este grupo cuarto de la División de Honor Juvenil donde tenemos muchos equipos profesionales y el Betis que dobla con el Calavera. Es otra plataforma más de nivel para el jugador español de cantera si pensamos en el jugador español porque hay que pensar que si La Cañada no jugase en esta Superliga, si un jugador de La Cañada destacase jugaría en alguno de estos equipos de Superliga. Al final es una plataforma para los jugadores, no pensando tanto en lo que son los clubes sino que es una oportunidad más para el futbolista español, para vivir escenarios de máxima exigencia, de máximo nivel. Serían equipos profesionales puesto que al final si en el grupo cuarto tenemos de los dieciocho equipos son diez profesionales, pasarían a ser de los veinte equipos diecinueve o dieciocho profesionales. Para un club de barrio será difícil, pero en el fútbol se ha demostrado de que todo es posible. Sí que es cierto que no está claro todavía por parte de la RFEF que esta nueva Superliga se vaya a implantar, aún no está en las bases oficiales de competición de esta temporada, pero hay que estar atento a ello. Es un objetivo más, dentro de la temporada hay un objetivo más, entrar entre esos cinco o seis primeros de la liga que te permitan al año siguiente mantener la máxima categoría del fútbol español juvenil.

P. Con una temporada ya en tierras almerienses y otra en camino, ¿qué ha supuesto La Cañada en su carrera y su vida?

R. Sobre todo un aprendizaje de saber que te tienes que adaptar. No solo a cada club, sino también a cada sitio de que al final el fútbol en cada lugar del mundo los futbolistas tienen una forma de pensar, una forma de ser por motivos culturales, por motivos ambientales. Te tienes que adaptar a eso, adaptar el método, que el proceso no sea que los jugadores se adapten a ti desde el minuto uno, tiene que haber un proceso de adaptación mutuo. Por eso el fútbol se dice que es un proceso. España no fue campeona del mundo en un año. Sino que fue campeona del mundo con jugadores que vivieron un proceso de 20 años de formación por poner un ejemplo. Al final lo que me ha supuesto para mí es un crecimiento. Es también darme cuenta de que para mí a nivel personal. el fútbol y la familia son los dos estandartes que pivotan sobre mi vida. Son los dos pilares más importantes de mi vida, los cuales compagino y los cuales tampoco me dan para mucho más. También me ha servido para conocer la provincia de Almería, su gente, estoy encantado aquí. Sí es cierto que decía que no era fácil cuando llegaba uno aquí a Almería y cuando se tenía que ir se iba llorando. Sí que es cierto que noto el cariño de la gente cada vez más. Cada vez considero más Almería mi casa. Al igual que en Dalian en China lo considero mi casa. Cada vez más a gusto, con ganas de dar muchas alegrías, sobre todo devolver ese cariño de la gente con alegrías en los partidos exitosos con la responsabilidad de devolver con grandes victorias como el año pasado contra el Málaga, Granada, el partidazo contra el Betis, devolver ese cariño con victorias que es lo que queremos este año.