Los vecinos de La Cañada llevan años reclamando la creación de un nuevo instituto de Enseñanza Secundaria que permita a sus hijos e hijas continuar sus estudios. Hablamos de una población de casi 10.000 habitantes, con unas necesidades de escolarización en ESO de 700 plazas, que ahí es nada. Todas estas familias hoy están de enhorabuena porque, gracias a su empuje y a sus movilizaciones, han logrado que los mandatarios del PP en el Ayuntamiento y en la Junta de Andalucía se pongan de acuerdo para obtener los terrenos donde construir el nuevo centro.

Han sido años de lucha vecinal, también política. Desde el PSOE hemos mantenido numerosas reuniones con ellos para conseguir que la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento atendieran su petición, presentando iniciativas, tanto en el ámbito municipal como autonómico, con intervenciones en el Pleno del Consistorio y del Parlamento andaluz. No en vano, ha sido curioso comprobar cómo el último trámite administrativo, que, por cierto, correspondía realizar al Área de Urbanismo del Ayuntamiento, se ha producido pocos días después de que los socialistas presentáramos una moción en la que solicitábamos al pleno su compromiso para instar a Moreno Bonilla a incluir una partida a tal efecto en los presupuestos de la Junta del próximo año 2024.

Lo ocurrido en la tramitación de este proyecto hasta la fecha nos deja una enseñanza clara: la incapacidad de los mandatarios populares para gestionar lo público y su falta de voluntad política para dar respuesta a las necesidades de la gente. El PP lleva más de seis años ya en el Gobierno de la Junta de Andalucía y solo en los últimos meses ha activado los trámites para la segregación de una parte de la parcela para que su titularidad pasara de la Consejería de Agricultura a la de Educación. Por no hablar de los años que ha tardado el Consistorio en ceder su parte de los terrenos a la Junta. ¿Es ésta la cacareada eficacia del PP al frente de lo público? Muchos de los padres y madres que iniciaron esta lucha hoy ven cómo sus hijos han comenzado la Universidad.

Ahora, sólo queda esperar a que esta vieja promesa finalmente se cumpla. Y, para empezar, queremos ver la partida correspondiente a la licitación para la redacción del proyecto en el Presupuesto Andaluz de 2024 porque ‘obras son amores no buenas razones’.