OPORTUNISMO, buen hacer o compromiso; los motivos pueden sospecharse pero no ratificarse, lo que sí es contrastable es el hecho de que en tres días de feria, tres consejeros autonómicos, el presidente de la Junta de Andalucía y una ministra han recorrido los pasillos del Palacio de Congresos Cámara de Almería. En principio, nada reprobable, sino más bien plausible. ¿Pero que han aportado? Nada, salvo unas cuantas varices a los periodistas, que como yo hemos tenido que estar armándonos de paciencia ante su impuntualidad para esperarlos, en unos casos más de una hora y otros cerca de ella para que nos atendiesen. Por un lado, la responsable del MARM, Rosa Aguilar, quien estuvo acompañada por Griñán deja un sinsabor al ceñirse a un discurso manido sobre las dificultades del campo; por su parte el presidente, en un gesto diplomático y de continuidad a las palabras de la consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera, hizo un guiño a los agricultores al recordarle a la ministra la necesidad de medidas para unos precios justos en origen, si bien al preguntarle sobre cuestiones como las dimisiones en su Gobierno o las acusaciones que se vierten sobre Chaves se mantuvo cauto y defensor a ultranza del partido al que representa. Pero lo que más sorprendió de la asistencia de ambos fue su evasión al saludo del alcalde de El Ejido, Juan Enciso, quien a la espera de la decisión de la Justicia y pese a quien le pese, es hoy representante de los ciudadanos ejidenses. Este gesto ha tenido repercusiones y es que Enciso es el que se ha sabido aprovecharse de ello. Además, tuvo que ser ayer, el presidente de la Cámara de Comercio de Almería, Diego Martínez, el que en unas declaraciones pidiese disculpas al alcalde en nombre de la organización. Ya sabemos que si el responsable cameral quedase algún día sin empleo, para apagafuegos sirve, ya que después de los altercados con los agricultores en 2008 y ser él quien diese la cara cuando las represalias se dirigían a la Junta de Andalucía y Gobierno central, este año le ha vuelto a tocar.

Ayer le tocó el turno a los consejeros de Economía, Innovación y Ciencia y de Empleo, Antonio Ávila y Manuel Recio y más de lo mismo. Pasada la media hora de su cita prevista con los periodistas atendieron a las preguntas durante unos escasos cinco minutos. De la feria señalaron lo mismo que se decía antes de su celebración, añadiendo en su discurso algunas de las actividades que se desarrollaron estos días y, respecto a los temas de actualidad política y que les atañe, especialmente al consejero de Empleo, sobre los expedientes de regulación de empleo, nada de nada.

Parece que han pasado sobre la alfombra roja, pero no la de una feria profesional de la agricultura, sino la de un festival de cine en la que simplemente posan para salir lo mejor posible en la foto, porque con la que está cayendo podían decir algo, al poder ser sensateces, puesto que los ciudadanos, de quienes salen sus salarios quieren explicaciones.