El sopapo del voto en blanco

En la comisión de la dana, Rufián (premio Castelar al mejor orador concedido hace un año por los periodistas parlamentarios, ojo), tachó al compareciente Mazón de “inútil, miserable, homicida y psicópata”. Pablo Iglesias dijo en una tertulia que Aznar tendría que estar en la cárcel. Otros tertulianos también envían al trullo a Sánchez, es el nivelazo de las llamadas tertulias. El otro día, en una tele, escuché a uno preguntarle a otro si se arrepentía de no sé qué, y éste le contestó, elevando la voz, que “yo me arrepiento de lo que me sale de los cojones” (sólo eran las 10 de la mañana, ¿qué habría desayunado?). El presidente del Gobierno afirma que su mujer, su hermano y el fiscal son inocentes, ¿pero eso no lo dictaminarán los jueces? ¿Y se es un asesino por sentencia de un político o tertuliano? ¿Y no serán los psiquiatras los que deberán diagnosticar si uno es psicópata o no? ¿Sobrarán jueces? Más bien parece que faltan muchos, teniendo en cuenta cómo se ha normalizado en este país la corrupción de unos y de otros, aunque los talibanes del PP sólo ven la socialista y los del PSOE, la pepera. Feijóo le preguntó en el Congreso a Sánchez por Cerdán y éste le contestó con lo del ‘caso mascarillas’ de Almería. Si Pedro va a ‘gobernar’ sin el Parlamento, ¿por qué no cerrar el hemiciclo para ahorrarnos un dinero y, sobre todo, un bochorno? ¿Y psiquiatras, sobrarán psiquiatras? Faltan más que jueces, que ya es decir. Oriol Junqueras ha venido a sugerir que Aliança Catalana, ese partido que no disimula su xenofobia y está creciendo allí a costa de Junts y Esquerra, podría ser un “invento” de los servicios secretos y jueces españoles. ¿Está bien de la cabeza este hombre? Desde luego, el estar o no bien del coco es discutible. Uno cree estar en su sano juicio si considera que con un PP que no le hace ascos a Vox y en el que el ‘ayusismo’ triunfa, el PSOE tendría que ganar unas elecciones con más margen aún del que le da Tezanos… siempre, eso sí, que antes se hubiera deshecho de Sánchez, Bolaños y algunos más. Y que un PP, con la tropa que hay ahora al frente de los socialistas, tendría que conseguir una mayoría absoluta, olvidándose de Abascal… siempre, eso sí, que previamente hubiera jubilado a la propia Ayuso (por mucho que arrase en Madrid) y a Tellado y compañía. Soñar es bonito y de ilusión también se vive: con estos políticos un voto en blanco mayoritario sería un auténtico sopapo electoral.