El primer equipo prepara el importantísimo enfrentamiento de este sábado ante el Alcorcón y el filial hace lo propio para un encuentro también vital frente al Utebo. Los de Óscar Fernández están ya en la final por el ascenso a Segunda RFEF y confían en dar la primera alegría del fin de semana desde tierras madrileñas. En un audio enviado por el club, el entrenador del segundo conjunto indálico pide todo el compromiso para el último encuentro de la temporada. 

"No puedo predecir el futuro, me baso en argumentar el presente y éste es que veo al equipo ilusionado. A partir de ahí, ojalá se pueda conseguir pero hay que trabajar como hasta ahora. Los objetivos hay que cogerlos con la mano. Bendita ilusión, pero las ilusiones se pelean, se lucha por ellas". Y esa ilusión, está clara cuál es: "Que a las 21:00 haya un equipo en Segunda RFEF y a las 00:00 otro en Primera. Ojalá se pueda cumplir, pero hay que terminar de preparar todo bien y el sábado dar guerra.

La misma ilusión que hay hacia el primer equipo, la hay hacia el filial. Sin embargo, Óscar se ha encargado de rebajar la euforia y transmitir normalidad en el trabajo diario. "Ha sido una semana normal. Estamos cerca de uno de los objetivos que nos marcamos. Es el partido que queríamos después de una liga muy dura y dos eliminatorias complicadas. Hemos intentado fomentar todo lo que hacemos bien y pulir lo que debemos de mejorar. Soy partícipe de darle normalidad al día a día".

El míster tiene clara la clave para afrontar el choque. "Tenemos que ser fieles a lo que hemos hecho durante todo el año. Les he insistido en tranquilidad, coherencia y pensar en que con nuestros argumentos vamos a estar cerca de ganar. Por momentos, ante el Huétor Tájar perdimos el patrón de lo que fuimos. Abusamos del individualismo, algo que no nos favorecía, sin olvidar que enfrente había un brillante rival".   

Los pelos de punta

El comportamiento de los aficionados rojiblancos esta temporada está siendo digno de alabar. Con el primer equipo se instauró la tradición de cantar el himno a capela y el con el filial se está repitiendo en esta promoción en Estepona. "Lo de Almería es increíble. Ver la grada el domingo, con la gente cantando el himno... se me pone la piel de gallina. Hay un vínculo con la grada, todo lo que huele a Almería, huele a fútbol. Ojalá se pueda cumplir todo lo que predice la gente, hay que luchar por los que están ahí empujando. Ese gusanillo de fútbol que hay en Almería nos está dando muchas vitaminas para afrontar los partidos".

Finalmente, Fernández tuvo palabras para alabar al Utebo. "Es subcampeón del grupo aragonés después de pelear con el filial del Zaragoza durante toda la temporada y rozar el ascenso directo. A noventa minutos, puede pasar cualquier cosa. Todos los que estamos en estas finales nos merecemos el respeto".