El ritmo de contrataciones no va a ser frenético como el verano pasado, cuando hubo que afrontar diecisiete incorporaciones para acometer la necesaria limpia del vestuario tras tres campañas coqueteando con el descenso en la última jornada. Entonces incluso en el último día del mercado el Almería operó cerrando la cesión del colombiano Narváez con el Real Betis.

Las perspectivas ahora son distintas, pero eso no implica que la dirección deportiva tenga que acometer alrededor de diez fichajes, siempre y cuando se produzcan las previsibles salidas de futbolistas que han acabado el curso en el candelero, casos del Pichichi Álvaro Giménez o los extremos Rioja y Corpas, además de la difícil renovación de Real.

Hay una buena base sobre la que cimentar el nuevo proyecto (si es que puede emplearse ese término en una entidad de la volatilidad de la rojiblanca), lo que unido a las renovaciones que ya se han producido permite al Almería acudir al mercado en una posición más cómoda que hace un año, cuando hubo que esperar hasta la última jornada para saber si se eludía el temido descenso a Segunda B.

La única demarcación cubierta es la portería con las renovaciones de René y Fernando

Solo una posición, la portería, está cerrada en la actualidad gracias a las renovaciones tanto de René como de Fernando hasta junio de 2021. La única incógnita en este sentido pasa por saber en quién confiará el club para ejercer el rol de tercer arquero, si en Jero o en Batalla, que han defendido la meta del filial, pero en el resto de demarcaciones va a ser necesario firmar para completar las vacantes. Esta es la situación:

Defensa

La piedra inicial para confeccionar la nueva línea defensiva ha sido el anuncio de Tano Bonnín como primera adquisición de cara al curso 2019-2020. No obedece a la casualidad, ya que el eje de la zaga es una de las zonas que más desértica quedaba con la finalización de contrato de Ángel Trujillo y el regreso a sus clubes de origen de sus respectivos préstamos tanto de Esteban Saveljich (Levante) como de Juan Ibiza (Villarreal).

Los jugadores se despidieron en el campo tras el choque ante el Albacete

El fornido defensor central hispano-dominicano firmó hasta 2021 y se une al camerunés Lucien Owona, con contrato hasta junio de 2020 y del que Corona ya dijo que su agente no le ha transmitido que quiera salir. Eso significa que hacen falta al menos dos zagueros centrales más, si bien uno de ellos podría ser el propio Ibiza, por el que el club negocia para renovar su cesión.

Más complicado parece que Saveljich pueda continuar pese a ser uno de los predilectos de la grada. El jugador le pidió públicamente un “esfuerzo inversor” al presidente, pero Alfonso García no acaba de estar por la labor.

Faltarían dos centrales, dos laterales, un stopper, un mediapunta, un extremo y dos arietes

En los laterales, por su parte, es probable que haya que firmar a un carrilero para cada costado. En el zurdo Andoni López vuelve al Athletic Club e Iván Martos queda como titular de salida a la espera de que llegue alguien para hacerle competencia. En el diestro Romera renovó hasta 2021 y parte como fijo, mientras que la continuidad de Adri Montoro dependerá de la evaluación que haga de él Óscar Fernández, por lo que no se descarta tener que firmar a un lateral diestro.

Centro del campo

La medular se antojaba cerrada al contar casi todos los mediocentros con contrato en vigor y existir la posibilidad de prolongar el de David Rocha, llegado durante el mercado invernal. Corona dejó claro, sin embargo, que el centrocampista cacereño no seguirá al no seguir Fran Fernández en el banquillo, su principal valedor. Habrá por tanto que buscar a un sustituto y se ha hablado de Toni Sánchez (Barakaldo), teniendo en cuenta que De la Hoz, Aguza y Yan Eteki, todos con vínculo hasta 2020, sigan.

Están por ver aún las intenciones del Sevilla para con el camerunés, ya que tiene una opción de repescarlo, aunque a la dirección deportiva no le consta ningún movimiento de Monchi en tal sentido hasta la fecha.En la mediapunta la apuesta del club ha sido ampliar el contrato de Chema hasta 2021, toda una declaración de intenciones, ya que se asume el más que probable adiós de Juan Carlos Real tras su sobresaliente año, por mucho que la entidad esté intentando negociar para renovarlo. Es obvio que habrá que fichar a alguien más que sepa ejercer el papel de enlace con el ataque.

Delantera

En los extremos está por ver si se concreta la marcha de Rioja al Alavés, teniendo ya el club cerrado como recambio a Yanis Rahmani (Mirandés) para complementar en la izquierda a Gaspar Panadero, llamado a tener más minutos en el curso venidero. En la derecha, teniendo en cuenta que el club logre retener a Corpas, también seguido por equipos como el Levante, habrá que ir igualmente al mercado para traer una segunda opción, ya que Narváez regresa al Benito Villamarín.

Óscar Fernández tendrá que decidir acerca de la continuidad o no de Caballero

En la punta de ataque la situación también es compleja. Se da por perdido a Álvaro Giménez, que a cambio dejará entre el millón y medio y los dos millones de euros en caja (no se ha desvelado su cláusula de rescisión), mientras que Demirovic regresará al Alavés tras su fallido préstamo y la idea del área deportiva pasa por darle la oportunidad a Caballero de que Óscar Fernández diga si le interesa o no.

De sus cesiones en el Mestalla y el UCAM Murcia regresan Sekou y Hicham con dispar rendimiento. Mientras el marroquí tiene muy complicado hacerse un hueco (“debe ponerse las pilas”, dijo Corona) el senegalés podría arrancar como tercer ariete. En cualquier caso hará falta firmar a uno o dos ‘9’.