El Toyo vuelve a construir

El paisaje de grúas paradas durante los peores años de crisis de la construcción se desdibuja. Lo hace en el centro de la capital, en la Vega de Acá o en La Molineta, y también en El Toyo, el residencial turístico que se vendía en 2004 como la “joya de la corona” y uno de los principales escaparates en la provincia a la hora de medir la salud del sector. Pues bien, se recupera. Tras años en los que no se ha movido ni un solo ladrillo en la edificación de viviendas plurifamiliares, el residencial se prepara para recibir de nuevo la maquinaria privada y ofrecer al mercado cinco nuevos edificios y un total de 140 viviendas.

No es un proyecto de futuro. Las obras están a la vuelta de la esquina. El Ayuntamiento de Almería, a través de la Gerencia de Urbanismo, acaba de conceder licencia de obras a la empresa promotora, Sacyr Gestión de Activos, que compró a Vallehermoso, una de las sociedades abanderadas del inicio del desarrollo de El Toyo, dos parcelas de atractiva ubicación (las MX-3.2 y MX-3.3), situadas entre las calles de los Juegos de Atenas y de los Juegos de Languedoc-Rosellón.

Esta promoción, distribuida en cinco bloques con planta sótano para garaje y trasteros, piscina, pistas deportivas y espacios libres comunitarios con zonas también infantiles, supone una inversión superior a los once millones de euros, una inyección para el despertar de El Toyo que aporta además ingresos a las arcas municipales de 160.000 euros en concepto de tasas.

Según el proyecto presentado al Ayuntamiento, las viviendas programadas son de dos, tres y cuatro dormitorios, 28 por cada una de las cinco edificaciones de tres plantas de altura. Los bloques son todos iguales y lo que varía es la tipología de cada casa, todas con terrazas corridas de 2,4 metros de ancho y largo variable, tendederos y baño y aseo incorporado al dormitorio principal.

Mientras en El Toyo se da forma a esta nueva promoción (en la actualidad hay poco más de 2.300 viviendas de las 4.802 que fueron planificadas en 2004 en el residencial turístico), otros puntos del término municipal vuelven a recibir grúas. Sin duda, el centro de la capital está protagonizado por la promoción de El Toblerone (Toblerone), con una primera torre, cuyas obras están en fase de cimentación, ya vendida y una segunda torre que ha salido recientemente al mercado con nuevas viviendas de alto standing disponibles mediante su reserva.

La Molineta es otro punto que encara la construcción de un edificio de 53 viviendas, el residencial San Rosendo (San Rosendo), la torre singular que ve camino despejado después de una veintena de años en programa.

La Vega de Acá, zona que ha aguantado el chaparrón de la crisis económica y que ha visto movimiento durante la misma, retoma actividad con la construcción de 45 viviendas, con licencia de obras aprobada la pasada semana.