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La Asociación Amigos de la Alcazaba ha activado las alarmas a través de las redes sociales, donde el colectivo patrimonialista ha denunciado la falta de control exhaustivo en unas obras de edificación en pleno casco histórico.
Tras la demolición hace dos veranos de dos inmuebles en la calle Atarazanas para la construcción de una casa cofrade, el preparativo del solar ha comenzado sin una debida supervisión arqueológica, según denuncia Amigos de la Alcazaba. “Estamos hablando del núcleo histórico de Almería musulmana: la zona de las Atarazanas, la Alcaicería y la Mezquita Mayor”, explica el colectivo, desde donde se apunta que “al parecer se han hecho solo dos catas, y ¡a la pala!”.
Personados en el lugar, han podido comprobar que la remoción de los terrenos que incluye la excavación “hasta dos metros de profundidad”.
“Resulta raro que no aparezca ni un trozo de cerámica, en ese solar que está a muy pocos metros del enclave arqueológico Puerta de Almería. Pero todo es posible. Lo que no es posible, ni tolerable ni legal –comenta la Asociación en su perfil– es que los trabajos de remoción de una zona con alto potencial arqueológico no estén supervisados por un arqueólogo responsable, conforme a la ley y la práctica arqueológica. Solo estaba el maquinista y no tenía ni idea de dónde estaba el arqueólogo ¿Qué ocurre si se encuentra restos ? ¿Quién decide si hay que parar las obras?”, se cuestionan.
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