Las palabras escritas de Vicent se premian con la Insignia de Oro

Un libro deja volar la imaginación de sus lectores y una película tiene que plasmar la máxima credibilidad para sus espectadores. El debate entre el libro está mejor que la película o viceversa se produce cuando los factores fallan en algunos de los requisitos anteriores. Así, uno de los ponentes del Curso De la página escrita a la pantalla impoluta. La novela en el cine, el escritor Manuel Vicent, recibió la Insignia de Oro de la Universidad de Almería.

El rector de la UAL fue el encargado de imponer este galardón al escritor de Tranvía a la Malvarrosa. Este libro transformado en película está dirigida por José Luis García Sánchez y participan actores como Liberto Rabal y Ariadna Gil, entre otros.

Vicent realizó una ponencia y una rueda de prensa antes del galardón. Para el escritor, es mucho más barato escribir una novela: “Un folio en blanco lo permite todo, la película está limitada por la industria. El proceso de una película es dinero y talento”.

Sobre el libro, Vicent quiso explicar algunos aspectos: “No pasa nada y pasa todo. La novela es el paso de la adolescencia a la edad adulta. Suceden momentos clave en los que se van cambiando de estado”.

Sobre el homenaje, Vicent quiso dejar algunas palabras: “Es el primer homenaje que recibo en mi vida o el primero que acepto. Lo he hecho por amistad porque los tres o cuatro años que ha venido aquí han sido días felices”.

El rector de la UAL, Pedro Molina, quiso dejar unas palabras y explica el motivo de la concesión de la Insignia de Oro de la Universidad: “Concurren en él un cúmulo de méritos personales y en su obra las suficientes cualidades técnicas y estéticas como para hacerle merecedor de dicho reconocimiento”.

Molina también lo ha descrito en otros aspectos como el personal: “Estamos ante un escritor de una impecable trayectoria vital que se ha erigido ante todo en la pluma por excelencia de la transición española”. Según ha destacado el rector: “Es el gran cronista de la épica de lo cotidiano”.

También recordó algunas de las referencias que el escritor realizó en toda su historia: “Su maestría en el oficio de narrar y el dominio magistral del lenguaje siempre han estado al servicio de lo que él mismo llamó ‘los dioses menores’, los placeres de la vida”.

El escritor quiso decir algunas palabras tras la imposición de la Insignia de Oro: “Los elogios los acepto porque el que los rechaza es que quiere dos”.

Además, demostró humildad ante el galardón: “No sé porque se le imponen medallas a los artistas. Es un oficio como cualquier otro.La voy a lucir con orgullo y gratitud”.

Para Vicent, hay un momento que es uno de lo que más le gustan: “Disfruto cuando estoy sentado en las terrazas de un bar y veo pasar a la gente.Ver las reacciones, los padres con chancletas...”.

El escritor también hizo referencia a las nuevas tecnologías: “Llegará el momento en el que los libros van a desaparecer, pero la curiosidad no”.

Sobre algunos rincones del cine almeriense que no se encuentran en las mejores condiciones como El Cortijo del Fraile señaló: “Es mitología del cine. Hay que reivindicar esos paisajes”.