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El Almería, a mejorar desde la defensa al balón parado

Embarba y Arribas disputan un balón en el entrenamiento del viernes

Embarba y Arribas disputan un balón en el entrenamiento del viernes / UDA

Tras el descanso dominical, el Almería regresa a escena para preparar el duelo del próximo domingo (16:15 horas) en Gerona. Lo hará con Garitano haciendo especial hincapié en el aspecto defensivo, foco en el que el técnico vasco ha puesto la atención en los ocho entrenamientos realizados hasta la fecha (todos ellos, a puerta abierta, algo inaudito en el fútbol profesional actual). El nuevo entrenador rojiblanco es consciente de la importancia de mejorar esta faceta, uno de los objetivos de Vicente Moreno, quien no sólo lo logró, sino que la empeoró, destacando esos 24 goles recibidos (2'67% por partido).

El objetivo primordial de ganar en contundencia defensiva, que se puede comprobar en cualquier sesión, ya ha calado en el vestuario. "Vicente a lo mejor era un poco más ofensivo, más salida de balón desde atrás. Gaizka es más intenso, le gusta a su justa medida sacar el balón desde atrás, asumir pocos riesgos atrás, que es lo que necesitamos ahora porque llevamos muchos goles en contra". Son palabras de Arribas en la entrevista concedida a Diario de Almería. Esa contundencia defensiva no sólo se refiere a lo que se hace sin balón o en los duelos, sino a los errores en salida de balón que ha mostrado hasta ahora un Almería frágil y errático.

En este sentido, el técnico vasco ha hecho hincapié con Baba, primer enlace entre la zaga y el resto del equipo. El objetivo es que el mediocentro ghanés juegue rápido y a pocos toques, sin intentar darse la vuelta. Relacionado con esto, la intención es que a partir de ahora los zagueros tengan el balón el menos tiempo posible, no sólo por una teórica inferioridad técnica, sino, sobre todo para no asumir riesgos en zona de iniciación.

Naturalmente no es sólo el aspecto defensivo lo que preocupa, sino cómo recomponerse en ataque tras las graves lesiones de Luis Suárez e Ibrahima Koné. A pesar de no contar con los dos únicos delanteros del primer equipo, las opciones son múltiples, pasando por reconvertir a extremos como Baptistao, Lázaro Vinicius o Ramazani hasta jugar con falso nueve con un mediapunta como Arribas, sin descartar darle la oportunidad a Milovanovic o Marciano, entrando en este escenario incluso el nombre de Rachad.

Garitano también tiene trabajo en cuanto construcción se refiere. Con un fútbol más pragmático, será fundamental la figura de Robertone para dar pausa, además de las de Melero o Arribas en busca de ese último pase. Con el foco puesto en el aspecto psicológico y cómo revertir el peor arranque histórico, mejorar a balón parado en un fútbol cada vez más igualado es otro de los retos de Garitano.

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