El Paseo de la ciudad acogió a una muestra del dispositivo perpetrado para la Feria y atrajo a decenas de curiosos

Un amplio despliegue de agentes policiales se encarga de custodiar la seguridad de los ciudadanos durante la Feria de Almería. Este dispositivo tiene como objetivos primordiales en primer lugar, proteger el ejercicio de los derechos y libertades de los ciudadanos y, además, garantizar su seguridad y velar por ella.

Esta importante labor policial adquiere una dimensión mayor si se tiene en cuenta que España actualmente cuenta con un grado 4 de alerta antiterrorista, por lo que la protección se centra en lugares en los que haya grandes aglomeraciones de gente, como en recintos de conciertos o plazas de toros.

Para que estas acciones lleguen a buen término, se han dispuesto una serie de destacamentos, entre los que se hallan la unidad de caballería, la de protección de seguridad ciudadana de la Policía Nacional en Almería, guías caninos y al grupo de TEDAX, que tiene el cometido de desactivar cualquier paquete que fuera susceptible de ser algún elemento explosivo y de inspeccionar aquellos lugares donde haya una gran abundancia de gente en los momentos previos a que esta acuda.

El robot TEDAX, encargado de desactivar explosivos, levantó expectación.

Para coordinar todo ello, un grupo de expertos de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana se ha encargado de diseñar el dispositivo de seguridad, mientras otro grupo de especialistas se ha encargado de permanecer desde las 22:00 hasta las 06:00 horas en el centro de coordinación, donde hay otros servicios de emergencias para dar una respuesta inmediata a la demanda que puedan tener los ciudadanos.

José Alcocer, portavoz de la Policía Nacional en Almería, comenta que todos los años se busca reforzar el dispositivo implementado en la Feria y que esto no implique “detraer la seguridad del resto de la provincia”, siendo precisa en este caso la colaboración de la Policía Local y del Ayuntamiento de la capital.

Alcocer se congratula de que “la Feria de Almería es un lugar seguro” y hace referencia a un descenso de un 30% de intervenciones realizadas con respecto al año pasado. “Eso significa que hay un refuerzo de agentes y que la ciudadanía ha colaborado”, argumenta.

Algunos de los guarismos que reflejan esta labor realizada en conjunto entre los agentes y los ciudadanos son los siguientes: se han llevado a cabo 39 despliegues policiales; 12 controles que comprueban quién entra y quién sale de la ciudad; se han atendido seis peleas sin consecuencias mayores y no se ha registrado ningún caso de abuso ni agresión sexual. Para este dispositivo, se ha contado con agentes de Almería, Granada, Madrid y Sevilla.