Carta del Director/Luz de cobre

Almería, el futuro pasa por la convivencia

La provincia de Almería seguirá creciendo y liderando en convivencia o su futuro no será

La provincia de Almería es tierra de oportunidades. En el último siglo de la historia reciente el crecimiento puede entenderse como impensable, incluso para aquellos que hemos participado, cada uno aportando lo que podía, en una experiencia única y que será analizada por los libros de historia en las próximas décadas y siglos.

Fuimos pioneros en lo que hoy se llama ‘España Vaciada’. Las escasas posibilidades económicas, la debilidad de nuestros recursos y el olvido secular de la administración nos llevó a abrir la vía de la emigración como único camino de lucha contra la desesperanza y la miseria. Fueron muchos miles los almerienses que cogieron su maleta de cartón piedra, el hatillo y los niños y se subieron al tren de la oportunidad que ofrecían entonces regiones ricas como Cataluña o Madrid y otros países, que desperezados de las consecuencias de la Gran Guerra, abrían senderos de vida en Francia, Alemania e incluso Suiza. Pueblos enteros soportaron como sus vecinos marchaban, las viviendas se cerraban y la oscuridad de la puerta cerrada daba paso al silencio de lo que un día fue vida, juegos, actividad y familia. Pero la innovación está en nuestros genes. Por aquí han pasado grandes pueblos creativos como los fenicios, los romanos, los cartagineses y los musulmanes. La mezcla de todos nos ha llevado a nunca darnos por derrotados, a creer en el futuro de esta tierra y sus posibilidades. Y a fe que las tenía. Pioneros e innovadores abandonaron el parral cuando no tenía futuro y usaron las estructuras para adelantar meses los cultivos de hortalizas y ponerlas en el mercado cuando en el resto del continente las borrascas y las nevadas congelan e hielan cualquier intento de producir un tomate, por decir un producto.

Y todo cambió. De ser exportadores de mano de obra fuimos receptores de inmigrantes. Los ingresos se multiplicaron y con ellos el desarrollo de una provincia, que ha pasado en pocas décadas de estar en el furgón de cola de las españolas a la zona cómoda de la tabla y con intentos serios, si no de jugar la Champion, si de alcanzar la Uefa. El camino recorrido no ha sido de rosas, ha estado plagado de obstáculos que aún permanecen, incluso se acrecientan. La llegada de mano de obra de más de cien países genera tensiones, falta de viviendas, choques culturales y convivencia. ¡Ojo! y no uso integración como desde algunos sectores se nos quiere imponer porque el término creo que no es el correcto. Aquí no se trata de integrar nada. Aquí lo que buscamos, y nos irá bien, es avanzar en la convivencia de todos, sin exclusiones, no ya de aquellos que acaban de llegar o de los que conviven entre nosotros durante años. Ahora, el nuevo reto es convivir con los hijos que han llegado, españoles como nosotros, aunque con problemas por resolver aún complejos. Y es que la provincia seguirá creciendo y liderando también convivencia o su futuro no será.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios