Lobas en el Acebuche

LAS reclusas de la prisión provincial de Acebuche las apodaron "Las Lobas". No se sabe si por su carácter poco sociable, solitario y retraído o por el dilatado historial criminal que acumulaban sus nuevas compañeras de celda. Han pasado veinticinco años desde que Maria del Coro Eguibar Michelena fuese la primera mujer de la organización terrorista ETA que ingresara en la cárcel almeriense a donde fue trasladada la madrugada del miércoles 5 de julio de 1989. Llegó en una conducción especial de la Guardia Civil procedente del centro penitenciario de Mujeres de Badajoz. Este traslado formaba parte del plan diseñado por el Gobierno en el capitulo de dispersiones promovido por la Dirección General de Instituciones Penitenciarias.

Maria del Coro Eguibar, natural de San Sebastián, estaba soltera y tenía 30 años de edad. Fue detenida en 1982 por su participación junto a otros miembros de la banda terrorista ETA, de la voladura de una torreta de conducción eléctrica ubicada en el monte Oyarzum en Guipúzcoa. También se le imputó su participación en la colocación de una carga explosiva en el interior de un vehículo de la Guardia Civil, que no llegó a ocasionar desgracias personales ni daños materiales al ser providencialmente desactivado por los GEDEX de la Benemérita.

En ese rosario de actividades a Maria del Coro Eguibar se le acusó también del intento de asesinato a un guardia civil destinado en el acuartelamiento de San Sebastián al poder ser interceptado el comando y todo su armamento antes de que llegasen a consumar el asesinato.

La segunda "loba" se incorporó apenas dos meses mas tarde. Se trataba de María del Pilar Aramburu Quiñones integrante del denominado "Comando Madrid". Ingresó en Acebuche la tarde noche del 4 de septiembre en un traslado efectuado por la Guardia Civil procedente de la cárcel de mujeres de Yeserías en Madrid en donde había estado recluida desde el año 1987.

Estaba condenada a la pena de diez años de reclusión mayor por colaboración con bandas armadas y tenencia ilícita de armas y explosivos. Fue detenida la noche del 16 de enero de 1987 a raíz de una espectacular operación policial desplegada fundamentalmente en la capital de España y en algunos puntos del País Vasco.

Como consecuencia de esta acción antiterrorista quedó desarticulado el "Comando Madrid". Entre los detenidos se encontraba también Belén Calzacorta Aramburu hija de la reclusa trasladada y que fue interceptada en la frontera de Irun cuando regresaba de pasar sus vacaciones esquiando en Alemania.

Maria del Pilar Aramburu ingresó en Carabanchel el 23 de enero y posteriormente fue trasladada a Yeserias de donde llegó a la cárcel almeriense. Según constaba en su historial delictivo, la activista tenía cincuenta años, había nacido en San Sebastián y fue detenida por la Policía un año y medio antes al hallársele oculto en un chalet de su propiedad en la localidad madrileña de Morazarzal un amplio arsenal de armas y explosivos, preparados para su previsible utilización por los miembros de la organización terrorista vasca con destino a poder ser utilizado dicho material en la comisión de nuevos atentados.

La política de dispersión de presos de ETA provocó que veintidós días mas tarde, el 26 del mismo mes llegase desde la prisión provincial de Cuenca hasta tierras almerienses la "tercera loba" para alojarse en Acebuche. Se trataba de Cristina Arrizabalaga Vázquez también integrante del denominada "Comando Madrid". Treinta años recién cumplido, natural de San Sebastián y peluquera de profesión. Curiosamente su hermana fue coronada "Mis Guipúzcoa".

Estaba condenada a trece años de cárcel. Fue detenida la madrugada del 17 de enero de 1987 en Madrid por la Policía, junto a otras cinco activistas más considerados como miembros del peligroso "Comando Madrid" al que le fueron atribuidos mas de veinticinco asesinatos confesados.

Cristina Arrizabalaga fue detenida en un cuarto piso de un inmueble situado en la calle Río Ulla número 8 en el barrio madrileño de Ciudad Lineal. En esta operación antiterroristas fueron además detenidos, Antonio Troitiño Arranz, de 30 años, Esteban Nieto, 30 años, José Ignacio de Juana Chaos de 31 años y las compañeras de piso de Cristina Arrizabalaga, Inmaculada Noble Goicoechea de 26 años y Maria Teresa Rojo de 30 años.

Las diez acciones mas sangrientas de ETA por parte del Comando Madrid se iniciaron en julio de 1978, El general Sánchez Ramos y el teniente coronel Pérez Rodríguez murieron ametrallados en el interior del coche oficial. En mayo de 1980, una bomba arrojada desde una motocicleta contra el vehiculo oficial del teniente general Valenzuela lo hiere gravemente y mueren en la acción un sargento ayudante y el conductor soldado.

En el mes de abril de 1982 el comando Madrid da un nuevo golpe de efecto apoderándose de la central telefónica de Ríos Rosas en la capital de España. A finales de marzo de 1983 la banda secuestra al financiero Diego Colon y Carvajal. Un año mas tarde en enero de 1984 es asesinado en Madrid el general Quintana Lacci, cuya actuación fue decisiva para el fracaso del golpete Estado del 23-F.

En el mes de septiembre de 1985 el comanda hace explosionar un coche bomba en la plaza de la Republica Argentina en Madrid al paso de un furgón de la Guardia Civil en el que resultaron heridos diecisiete guardias civiles-uno de ellos de Almería-y muerto un peatón alcanzado por la onda expansiva cuando realizaba footing. A mediados de 1986 asesinan al almirante Colon de Carvajal, unos días antes de que el Congreso aprobara la convocatoria del referéndum sobre la OTAN.

En abril de 1986 el comando Madrid perpetra un nuevo atentado con coche bomba contra un vehículo de la Guardia Civil en la calle Juan Bravo muriendo en dicha acción cinco guardias civiles. A finales de julio de 1986 se produce el más sangriento de todos los atentados de ETA cometidos por este comando. Doce muertos al estallar un coche bomba contra un autobús de la Guardia Civil en la plaza de la Republica Dominicana. Finalmente a mediados del mes de septiembre de 1986, los terroristas disparan varias granadas anticarros contra la fachada del Ministerio de Defensa en Madrid, sin que afortunadamente no hubiese que lamentar desgracias personales.

Uno de los líderes de este comando fue Iñaki de Juana Chaos nacido en Legazpia el 21 de septiembre de 1955. Ahora se le califica como un ex miembro de ETA que, tras su detención en 1987, fue condenado judicialmente por su participación en 25 asesinatos a casi 3.000 años de prisión, de los que cumplió poco más de 18 años en aplicación de la legislación española entonces vigente. Se encuentra en libertad desde el año 2008 tras haber cumplido su condena y en búsqueda y captura por orden de la Audiencia Nacional. Desde el año 2006 se convirtió en una nefasta figura mediática con repercusiones políticas debido entre otros motivos, a su falta de arrepentimiento lo que provocó un amplio debate sobre el sistema penal y penitenciario español. De Juana siempre trató de situarse como jefe del grupo de etarras presos. Sin embargo, nunca fue designado por ETA jefe de lo que denominaban frente de makos (prisiones), ya que nunca terminaron de confiar en él.

Durante sus años de reclusión, De Juana siguió recibiendo la atención de los medios de comunicación, dando muestras de su constante falta de arrepentimiento. El 9 de marzo de 1993, tras el atentado en Sevilla donde un comando de ETA asesinó al concejal Alberto Jiménez-Becerril Barrio y a su esposa Ascensión García, mostró su alegría escribiendo en una carta "sus lloros son nuestras sonrisas y terminaremos a carcajada limpia". En julio de 1992 remitió una carta al juez de vigilancia penitenciaria de Cádiz avisándole de que figuraba en las listas de ETA como "ejecutable".