Servidores de seguridad

Los medios nos venimos quejando de la falta de policía y de guardia civil en la provincia de Almería, especialmente en los pueblos. Hoy Adra. Hay quien manifiesta, según estudios, que faltan más de ochocientos miembros, número este para poder hablar de estar en la media. Ante la reiterada queja, llega el dato: Para los más de setecientos mil almerienses que viven en nuestra provincia, hay 1.722 guardias civiles, y 738 policías. Es lo que nos comunica la subdelegación, que sienta sus reales en la calle Arapiles. En estas cifras no entran, como es lógico, los policías locales dependientes de los ayuntamientos, protección civil de Diputación y los vigilantes particulares que pagan las empresas que utilizan sus servicios. Si suman los dos primeros que afectan al gobierno central y al ministro Marlaska (se cuenta que el ministro ha apoyado con fuerza el que José María Martín sea el secretario provincial del Psoe), un total de 2.560 miembros están pendientes de la seguridad de los ciudadanos. Así, de entrada, no parece mala cifra. Y por ello nos la venden como de un triunfo de los políticos y de su defensa de los almerienses. Pero, si los repartimos en los turnos de trabajo, como es lógico, y en la responsabilidad de cada uno de los dos cuerpos, así como en la extensión en kilómetros cuadrados a la que se enfrenta la benemérita, nos hace pensar que con el número se nos quiere engañar. Que nos informen del número de guardias civiles que están dedicados al mar, pateras, petaqueos, los que lo hacen en el mundo forestal, los que andan enfrascados en la lucha contra las drogas, los que anda buscando multar en las carreteras, y cualquier otra actividad en la que estén trabajando los de verde. Así sabríamos de verdad el número que protegen a los ciudadanos de robos y delincuencia común, pero, no creo que nos los vayan a comunicar. Se vende mejor la totalidad, no es mal número, y el señor Martín le pone la medalla a su ministro de que dos mil quinientas sesenta personas están defendiendo la seguridad de los almerienses. ¿Cubren las necesidades de toda la provincia? Ese es el gran dilema al que se enfrentan en más del setenta por ciento de los pueblos de la provincia. ¿Tienen seguridad, se sienten seguros ellos y su cosechas? ¡Un mojón! Por ello, y ante las distintos comentarios que puedan recibir, si están interesados, es preferible que se lo preguntan a los vecinos de Berja, Adra y otros pequeños municipios, y verán lo que les dicen sobre la seguridad y la presencia de los guardias civiles en sus calles.