Nadie duda de los numerosos atractivos turísticos que hacen de Algeciras un destino vacacional único y diferenciado. Su clima suave, entre la Costa del Sol y la de la Luz, permite el disfrute de las playas durante prácticamente todo el año. Pero eso no es todo. El litoral algecireño está considerado como uno de los mejores del mundo para el avistamiento de aves migratorias, una actividad que lleva a la ciudad todos los años a un gran número de birdwatchers.

Los aficionados al senderismo de toda España conocen las particularidades de los bosques de laurisilva de la Sierra de Algeciras. Varias empresas ofrecen rutas guiadas a los visitantes a través del Parque Natural de Los Alcornocales. Rutas del Sur, por ejemplo, acompaña a los caminantes e interpreta el entorno botánico, histórico y paisajístico de senderos señalizados y homologados tan populares y exclusivos como el del Río de la Miel o la Garganta del Capitán. Los aficionados a esta variedad de ecoturismo son plenamente conscientes de la extraordinaria biodiversidad que esconden esos húmedos rincones de la geografía municipal.

El mar es otro de los puntos fuertes de Algeciras. El abrigo de la Bahía permite unas condiciones de viento y oleaje óptimas para la práctica de deportes como el kayak, el paddle surf, el windsurf o el kitesurf. La Playa de Getares, rodeada de un entorno de suaves y verdes colinas, cuenta con la infraestructura de Velair (velair.es), entidad ya veterana en la enseñanza, acompañamiento y asesoramiento sobre estos deportes.

Se pueden ver delfines en el Estrecho de Gibraltar.

Además, en verano, ofrece campamentos escolares perfectos para tener a los más jóvenes entretenidos en un entorno natural, aprendiendo y practicando deportes náuticos bajo la supervisión de monitores profesionales. El Parque Natural del Estrecho brinda un paisaje inigualable para el disfrute de estas actividades.

La Bahía de Algeciras es un enclave perfecto también para conocer una fauna marina de cetáceos que, aunque amenazada, aquí presenta un asombroso número de colonias y ejemplares. Delfines de varias especies son fácilmente localizables en el interior de la Bahía. Asomándose a las aguas del Estrecho de Gibraltar aparecen calderones, rorcuales u orcas, además de túnidos y peces luna, entre muchos otros. La avifauna marina también depara siempre sorpresas al visitante: las bandadas de flamencos o la actividad aérea y submarina de las alcas, por ejemplo, no deja indiferente al que se acerca por primera vez a este entorno paradisíaco. Marina Blue (marinablue.es) cuenta con un exclusivo yate desde el que hacer avistamientos durante todo el año. Otro excepcional y joven equipo, con embarcación para grupos reducidos e interpretación a cargo de biólogos marinos, es el de Estrecho Natura Ecotours.

Como punto final para celebrar una jornada en el medio natural, la gastronomía de restauración y tapas de Algeciras puede ser la mejor recompensa. Productos del mar y la montaña, combinados por una tradición milenaria y las manos expertas de los mejores chef hacen de la ciudad un enclave perfecto para los gourmets más exigentes.