Dentro del naufragio colectivo que está suponiendo la temporada 2023-2024 en clave UD Almería, son pocos los casos que se salvan a nivel particular. Repasando el plantel indálico, los jugadores que han ofrecido un rendimiento acorde al esperado podrían contarse con los dedos de una mano. Si bien se trata de una valoración con tintes subjetivos en base a las sensaciones ofrecidas, también hay variables estadísticas que apuntan a Luis Maximiano, Marc Pubill, Édgar González, Dion Lopy o Sergio Arribas como los únicos que se salvarían de la quema. Y eso que ninguno ha ofrecido una regularidad a lo largo de las 27 jornadas que se han disputado, sino que han tenido altibajos bastante acusados, pero su desarrollo está a años luz del resto de compañeros.

Todavía es pronto para valorar las incorporaciones del mercado invernal, casos de Aleksandar Radovanovic, Bruno Langa, Jonathan Viera, Luka Romero o Choco Lozano, si bien algunos de ellos, particularmente los defensores y el extremo argentino, han apuntado destellos. Luego están los casos de lesionados de larga duración como los delanteros Luis Suárez e Ibrahima Koné a los que tampoco se les puede evaluar al haber pasado más tiempo en dique seco que sobre el césped. 

Luis Maximiano

El meta luso tuvo un comienzo bastante complicado. Llegó casi sobre la bocina del cierre del mercado veraniego y Vicente Moreno lo hizo debutar bajo palos ante el Real Madrid sin apenas entrenar con el equipo ni conocer a su defensa. Parecía que el club quería evitar a toda costa y de forma precipitada otro 'caso Pacheco' como el del curso anterior, cuando la gran apuesta en la portería estuvo en el ostracismo debido a que Rubi se decantó por Fernando Martínez, que venía de ser el Zamora en Segunda y pieza clave en el ascenso. El portugués arrancó dubitativo, pero demostró grandes dotes de resiliencia y de saber encajar la crítica para renacer y mostrar su verdadera talla. Tanto es así que ha sostenido al equipo en no pocos partidos con su intervenciones, al punto de llamar la atención del FC Barcelona, que medita incorporarlo la próxima campaña en caso de deshacerse de Iñaki Peña. En el acuerdo de cesión con la Lazio quedó suscrita una opción de compra obligatoria en caso de permanencia y de liberación por descenso, por lo que el de Celeirós retornará al conjunto italiano para decidir su futuro.

Édgar González

Al igual que Maximiano, el jugador catalán tuvo un inicio para olvidar. Fue una apuesta fuerte de la dirección deportiva para apuntalar un maltrecho eje de la zaga, abonando al Betis alrededor de 4'5 millones por hacerse con sus servicios hasta 2028. El hecho de formar dupla unas veces con Montes y otras con Chumi o Kaiky tampoco ayudó en su proceso de adaptación, que poco a poco fue 'in crescendo', al punto incluso de ver portería en Montjuic ante el Barça y en el Santiago Bernabéu contra el Real Madrid. En la actualidad forma una pareja sólida con el serbio Radovanovic y todo apunta a que debe convertirse en uno de los pilares sobre los que se asienten los cimientos del equipo que el año que viene deberá buscar el ascenso desde la categoría de plata.

Édgar se ha asentado en el eje de la zaga y debe ser un pilar en Segunda

Marc Pubill

El lateral diestro fue la tercera incorporación del verano procedente del Levante UD, club al que la UDA abonó 5 millones en concepto de traspaso, firmando hasta 2029 como una clara apuesta de futuro. Venía de disputar el play off de ascenso con el conjunto granota y muy justo en el aspecto físico, por lo que tras una cuestionable gestión de cargas por parte de Vicente Moreno, entonces técnico rojiblanco, Pubill caía lesionado de la rodilla en el duelo de la cuarta jornada ante el Celta de Vigo. Tuvo que afrontar un duro proceso de recuperación, pero retornó dispuesto a demostrar que no se habían equivocado con él. Muy completo como carrilero, sabe guardarse la espalda y proyectarse al ataque, es otro jugador interesante para la base en Segunda y la entidad indálica pretende retenerlo. 

A Pubill le ha tocado vérselas con rivales top y suele salir airoso

Dion Lopy

En el caso del mediocentro senegalés ha ocurrido lo contrario que el resto de sus compañeros. Y es que su rendimiento parece haber ido en línea descendente, de más a menos en las últimas jornadas. Tuvo un pico alto, ofreciendo exhibiciones en los feudos de Barça y Real Madrid que llamaron también la atención del conjunto azulgrana, pero tras marcharse del duelo ante el Athletic Club por problemas estomacales, Gaizka Garitano parece haberlo relegado a la suplencia en beneficio de Iddrissu Baba. Firmado del Stade de Reims a cambio de 6'5 millones (en variables podría llegar hasta 10), el de Bambilor se comprometió hasta 2029, si bien parece claro que será uno de los activos con los que la UDA hará caja el próximo verano. Cabe recordar al respecto que El Assy ya rechazó un ofrecimiento del Friburgo alemán de alrededor de 15 millones de euros. 

Lopy, suplente en las últimas jornadas, ha llamado la atención del Barça

Sergio Arribas

Vino de Primera Federación y se ha convertido en el pichichi del equipo con media docena de goles. Ese dato lo dice todo sobre la irrupción de Arribas en la máxima categoría del fútbol español, si bien en las últimas jornadas también parece haber decaído su estrella en favor de Luka Romero. Está por ver cómo el madrileño logra recomponerse ante la llegada de un fuerte competidor en su demarcación. Costó alrededor de 6 millones de euros y firmó hasta 2029, por lo que está por ver lo que ocurrirá con su futuro ante el más que asumido descenso. Una opción sería cederlo a algún Primera que asuma su ficha al objeto de que siga curtiéndose en la máxima categoría esperando un pronto regreso de los rojiblancos, pero tampoco es descartable un traspaso si algún equipo pusiera sobre la mesa la cantidad en la que sea tasado. 

Arribas, pichichi de la UDA con 6 dianas, firmó hasta 2029