El municipio almeriense albergó este jueves el inicio de fiestas, uno de los grandes eventos del año. El día comenzó con la preparación de la paella mixta pensada para una cifra de entre 1500 y 1800 personas. Los ingredientes de la típica comida española fueron: gambas, jibia, carne de pollo y de cerdo junto a pimientos y tomates de la huerta almeriense. Cantidades de comida que llegaron a superar los 1.500kg.

Para realizar semejante hazaña llegaron de varios lugares de la provincia algunas cocineras junto a Antonio Gázquez, uno de los referentes de alimentación de Almería que realizaron este manjar para lujo de los allí presentes. A partir de las 19:00 horas se oficio la misa en honor a la Virgen María y tras su finalización fue llevada en procesión hasta la Plaza municipal.

Allí se acabó realizando la tradicional representación de Moros y Cristianos, que cuenta con más de 70 años de historia. Batallas, vueltas de banderas junto a la música de la banda municipal hicieron las delicias del público velefiqueño entregado a estas costumbres.

Al terminar este acto de historia y aprendizaje, la Virgen María regresó a la Iglesia de Santa María, del siglo XV, y se efectuó la entrega de trofeos por las distintas actividades del programa cultural del municipio.

Velefique pasaba a la fiesta nocturna en un momento y la plaza empezaba a llenarse de nuevo para poder escuchar a la orquesta Classic Show, que deleitó a varios centenares de jóvenes hasta pasadas las 06:00 horas de la madrugada con canciones tan típicas como Paquito el Chocolatero junto a pop español, pop rock y música alternativa.

El municipio concluirá los principales festejos hoy (aunque mañana habrá juegos infantiles y concurso de disfraces para finalizar la jornada) con la tercera representación de moros y cristianos, en la que se librarán varias batallas físicas y dialécticas entre ellos.