El principio de un largo camino hacia el olvido. El Alzheimer es una enfermedad orgánica, degenerativa y progresiva que afecta a la memoria, el razonamiento, el lenguaje…

Hace que el enfermo pase a depender, poco a poco, de los demás para poder desarrollar las actividades que conforman su día a día. Y es que sufre pérdida de orientación, dificultades en la planificación de actividades, problemas de atención, dificultades en el cálculo. Sin olvidar otras complicaciones como las alteraciones de conducta, apatía, depresión, ansiedad e incluso cambios de humor que se dan a lo largo de toda la enfermedad. Sus causas todavía no han sido descubiertas completamente, aunque existen importantes avances. El Alzheimer afecta sobre todo a la población mayor de 60 años, de hecho, sólo un 10% de los afectados son menores de esta edad. Con mayor frecuencia afecta a las mujeres.

En El Ejido conviven en torno a 8.800 habitantes mayores de 60 años, lo que representa el 11 por ciento del total de la población. "Según las estadísticas el Alzheimer podría estar afectando en el municipio a más de 300 personas mayores de 60 años, lo que hace necesaria una intervención profesional en los primeros estadios para frenar el desarrollo de esta enfermedad", ha indicado la concejal de Servicios Sociales del Ayuntamiento de El Ejido, Julia Ibáñez. Diagnosticar esta enfermedad en estadios avanzados es más fácil, pero en su inicio, los síntomas pueden pasar desapercibidos. Desde el Ayuntamiento de El Ejido, el trabajo con las personas mayores tiene dos líneas de trabajo bien definidas. "Una es la atención socio-sanitaria, es decir, son personas que de alguna manera tienen algún grado de dependencia, y en segundo lugar los programas de envejecimiento activo. Ambas líneas permiten trabajar con personas enfermas de Alzheimer", ha apuntado Manuel Ariza, jefe del área de Servicios Sociales del Ayuntamiento ejidense. Desde el enfoque de la prevención, donde se encuentran los programas de envejecimiento activo, el tipo de actividades que se vienen desarrollando con los mayores del municipio pasan por "cursos de formación, talleres de memoria, actividades culturales, todas las que se ponen en marcha en cualquiera de los once clubes de mayores del municipio", ha indicado Ariza.

Sin olvidar el apoyo a los familiares. En lo que a la atención sociosanitaria se refiere los recursos son muy amplios. Desde la Residencia de Mayores, el Centro de Día, el servicio de Teleasistencia. La enfermedad del Alzheimer pasa por diferentes etapas, caracterizadas por un empeoramiento progresivo de la sintomatología, pudiendo dividir el proceso de la enfermedad en estadio inicial, intermedio y grave. A medida que avanza, aumentan los costes en el cuidado de estos pacientes y las consecuencias negativas en la calidad de vida de pacientes y cuidadores. "La personas que tienen Alzheimer reciben una atención específica dependiendo del estadio en que se encuentren. En la medida en que la dependencia hace que esas personas no se pueden valer por sí solas la recuperación no es posible, porque hoy por hoy no existe una cura para esta enfermedad, pero sí podemos lograr paliar los síntomas y tratar de que sean lo menos dependientes posible, gracias a la recuperación psicológica, terapia ocupacional, fisioterapia", apostillaba Julia Ibáñez. Los servicios con que cuenta el municipio para atender al colectivo son muy amplios, pero encaminados en su mayoría a enfermos que ya se encuentran en los primeros estadios de la enfermedad.

Por ello, y a fin de impulsar la prevención, desde el Ayuntamiento, a través de Servicios Sociales, se ha solicitado recientemente una subvención a la Consejería de Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, encaminada a reducir el impacto que tiene la enfermedad tanto en el enfermo como en el entorno familiar. "Hemos solicitado una subvención, por importe de 10.000 euros, para el Programa de Atención Temprana con enfermos de Alzheimer", ha indicado la edil responsable del área.