El Centro de Inserción Social (CIS) de Almería tendrá dotación presupuestaria y personal a final de año y no se destinará a usos diferentes al de atender a presos en tercer grado, como puede ser acoger a inmigrantes llegados en patera, según informó ayer el subdelegado del Gobierno, Manuel de la Fuente.

Aseguró que el CIS ubicado en el barrio de El Puche es una de sus "prioridades", así como que pretende aprovechar un próximo viaje a Madrid para abordar su apertura con Instituciones Penitenciarias. Su objetivo es "lanzarlo" y cumplir con la previsión de que "a final de año se dote presupuestariamente y con el personal que se necesita".

"Es un centro modélico, ejemplar, que tiene una función importantísima. Estamos hablando de las personas que están en tercer grado, en régimen de semi libertad, y ese tránsito de este espacio en el que han aprendido a valorar la libertad pues pasar a poder reintegrarse progresivamente es la culminación de un proceso", explicó.

Tras insistir en que pretende que este centro ya finalizado se "ponga en marcha lo antes posible" fue interpelado sobre si se destinará únicamente a su finalidad original o se compatibilizará con otros usos, ya que en su momento se planteó incluso su posible reconversión a Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE). "No se entendería que el centro se destinara a otras funciones distintas para las que fue diseñado (la atención al tercer grado penintenciario) (...) Eso es lo que está destinado, predestinado y esa es la intención. Es verdad que en algún momento, en momentos de mucha presión ha habido quién ha estado barajando otros usos", mantuvo.

"Bajo ningún concepto tiene sentido que en la ubicación que tiene, darle otro tipo de uso", incidió.