Los gadorenses se han dado cita un año más en la explanada de Las Chimeneícas para celebrar el tradicional Jueves Lardero, una antigua celebración popular muy arraigada en Gádor en la que los vecinos se congregan en el campo para disfrutar de una jornada de convivencia, degustando diversos platos de la gastronomía almeriense así como los típicos hornazos de esta festividad local.

Aunque la afluencia de participantes de este año ha sido algo menor que en anteriores debido a que el tiempo no acompañó, siguiendo la costumbre, el jueves anterior al miércoles de ceniza, junto antes de las Fiestas de Carnaval, los gadorenses se concentraron en el paraje de Las Chimeneícas de la Rambla de las Balsas para disfrutar en compañía de familiares y amigos de un almuerzos campestre y compartir el típico hornazo, que no es sino un bollo de pan de aceite, en cuyo interior se esconde un huevo cocido. La tradición exige que las familias lleven tantos bollos como familiares y amigos vayan juntos a la fiesta.