Después de años de demanda social y sin anuncio alguno, Adif ha comenzado las obras para la supresión del paso a nivel de El Puche, mediante la solución soterrada prevista dentro de los planes capitalinos para la llegada de la Alta Velocidad en su primera fase.

Los trabajos, adjudicados en julio a la empresa Comsa, se prolongarán durante trece meses, diez de los cuales el tráfico ferroviario quedará afectado, motivo por la que se está acondicionando la estación de Huércal y la entrada en servicio en noviembre de las líneas de autobús que conectarán con la intermodal.

La actuación en El Puche, respaldada con una inversión de 15.475.500 euros, que comparten el Gobierno central, el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía, afecta a 1.153 metros de longitud correspondiente a la actual vía de ancho convencional, que discurre entre los puntos kilométricos 247/500 y 248/653. Es decir, entre el polígono industrial del Sector 20 y las inmediaciones del paso superior de la carretera de Níjar. La intervención programada contempla el soterramiento de 170 metros y la construcción de una glorieta en superficie que mejore los nudos de tráfico rodado en este punto, siendo su diámetro proyectado de 80 metros. Con esta rotonda se pretende solventar los problemas de circulación existentes con un mejor comunicación entre un número considerable de viales: las calles Isla Cabrera y Rosa Chacel, avenida de la Tolerancia, avenida Mare Nostrum, calle Mariana Pineda -continuidad de la carretera de Sierra Alhamilla-, y la carretera del Mamí.

El alcalde de Almería (PP), ha reclamado a Fomento la siguiente fase del plan de integración ferroviaria, mientras que la portavoz municiapal del PSOE se congratulaba ayer de este inicio de obras.