Andalucía

El fango de los audios... y las oposiciones

El diputado popular Erik Domínguez y el portavoz del PP, Toni Martín

El diputado popular Erik Domínguez y el portavoz del PP, Toni Martín / E.P./Rocío Ruz

Hay incomodidad, preocupación y gestos torcidos. En el PP andaluz se encienden las alarmas nada más que hay una sombra de presunta corrupción, de trato de favor o de algún tipo de asunto turbio que pueda afectar a alguno de sus miembros. Porque saben muy bien que la corrupción fue la que cavó la tumba electoral del PSOE andaluz y que ese fue, precisamente, uno de los argumentos que llevó a Juanma Moreno hasta el Palacio de San Telmo.

Y ahora tienen un caso que ha saltado hasta las televisiones nacionales (eso ya son palabras mayores) por más que todos los cuadros del PP, empezando por el propio Moreno, apoyan sin ambages al diputado en la diana. Ayer eran notorios los abrazos y muestras de afecto expreso que los compañeros de grupo parlamentario hacían hacia quien se llevaba todas las miradas en los pasillos del Parlamento de Andalucía.

Había sesión plenaria pero, como suele ocurrir con relativa frecuencia, los verdaderos debates se producían más en los pasillos que en el salón de plenos.

Pero es que, además, se trata de un presidente provincial del PP, el de Jaén concretamente. Erik Domínguez lleva una semana en el centro de la polémica después de que se filtrara un audio que envió a un exdiputado de Ciudadanos, también de Jaén, informándolo de las bases de un concurso público para el Consorcio Metropolitano de Transportes.

Unas bases que, presuntamente, le envió antes de que fuesen publicadas oficialmente, extremo que Erik Domínguez niega argumentando que ya eran públicas aunque reconoce que no se habían publicado en el BOJA.

Eran para un puesto de gerente en el Consorcio Metropolitano de Transportes, organismo que depende del Gobierno andaluz, y cuyo destinatario era el único ex de Ciudadanos, Enrique Moreno, que no había encontrado acomodo en las filas populares tras la debacle electoral de la formación naranja.

Los hechos se remontan a dos años atrás, ¿por qué salen ahora? Hay, claro, varias teorías.

El PSOE a través de su portavoz en el Parlamento Ángeles Férriz, insistía este miércoles en pedir explicaciones al presidente de la Junta , Juanma Moreno, sobre el “vergonzoso” audio difundido del presidente provincial del PP en Jaén porque permanece “callado”.

Férriz censura el “descaro y desahogo” del diputado popular con la condición de que hiciera “campaña” en favor del PP. “Estos señores se piensan que los andaluces y los españoles somos tontos, porque es que el audio no deja lugar a dudas”.

Desde Por Andalucía también piden la dimisión del diputado popular por lo que consideran una actuación llena de sombras de corruptelas, mientras que Adelante Andalucía considera que hay corrupción si n paliativos.

La polémica no termina aquí ya que el puesto al que optaba en ex de Ciudadanos, ha recaído finalmente... en el presidente del PP de Menjíbar. Hay que recordar, por otra parte, que se trata de un cargo político y de confianza.

La otra pata

La historia no está completa si no se tiene en cuenta que mañana viernes se celebra en Jaén el juicio por la denuncia falsa de la compra de votos en el que tienen que declarar como investigados el exalcalde de la capital jiennense, Julio Millán, y la vicepresidenta de la Diputación Provincial de Jaén, África Colomo, tras una denuncia en la que el propio Erik Domínguez ha tenido mucho que ver.

Para terminar de cerrar el círculo está la actual situación profesional de Enrique Moreno, quien ha aprobado una oposición del nivel A1... en la Diputación Provincial de Jaén que gobierna precisamente el PSOE. Enrique Moreno ha obtenido una de las siete plazas que se ofertaban y la ha logrado entre 253 candidatos. Hay quien destaca la coincidencia de fechas entre la filtración del audio que implica al diputado del PP y estas oposiciones.

En medio de este galimatías de acusaciones veladas, desconfianzas y exabruptos directos, ayer había en el Parlamento andaluz alguna diputada que todavía creía en que es posible parar la máquina del fango. “Ya hemos superado el tope”.

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