La dimisión que el viernes presentará Luis Rubiales del cargo de presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) en la Asamblea General Extraordinaria que se celebrará en la Ciudad del Fútbol, dará paso a la constitución de una Comisión Gestora según el artículo 31.9 de los estatutos y a una futura convocatoria de elecciones.

"Si el Presidente cesara por causa distinta a la conclusión de su mandato, la Junta Directiva se constituirá en Comisión Gestora y convocará elecciones para proveer al cargo", apunta el artículo 31.9 que especifica que aquel "que resulte elegido ocupará el cargo por tiempo igual al que restase por cumplir al sustituido, siendo además de aplicación, en lo que a éste respecta, la norma que prevé el artículo 23.2, del presente ordenamiento".

En ese artículo, se refleja que en el caso de que no se consume el período del mandato actual, "quienes ocupen las vacantes ejercerán el cargo por tiempo igual al que restase por cumplir a los sustituidos" y "no podrán presentarse a una nueva elección hasta que transcurra el período olímpico para el que fueron elegidos".

Ese punto supondría que si la Comisión Gestora convocase elecciones, el elegido para el cargo de presidente, estaría al frente hasta el segundo semestre del año 2024. Desde entonces, tal y como recoge el Real Decreto que regula los procesos electorales en las federaciones deportivas, se celebrarían una nueva convocatoria de elecciones.

Dentro de la Federación, los primeros nombres que se apuntan para ocupar el puesto de Rubiales son Miquel Bestard, vicepresidente de la RFEF y el cargo de mayor edad si se siguiese ese patrón, y con el mismo cargo en el ente federativo Pedro Rocha, presidente de la Federación Extremeña, y Pablo Lozano, responsable de la Federación Andaluza.