Visto lo visto en las tres últimas temporadas del Almería en la élite, una permanencia es un éxito aunque se produzca en el minuto final de la jornada 38. Sin embargo, Rubi considera que su plantilla tiene potencial para evitar sufrimientos de última hora, opinión que comparte la cúpula del club, que espera hacer los deberes con antelación para poder ver en acción a jugadores que están teniendo menos oportunidades como Vinicius. El técnico nacido en Barcelona y criado en Vilasar de Mar ha creado un ecosistema interesante, compitiendo su equipo siempre en una categoría repleta de tiburones.

Con el debe de los resultados como foráneo y después de no lograr el triunfo en Cádiz a pesar de hacer un buen encuentro, el Almería encara el domingo con el objetivo de lograr media decena de triunfos consecutivos en el Power Horse Stadium, todo un hito en la historia del club. La empresa no será nada fácil al tener enfrente a uno de los equipos más difíciles de Europa. La Real Sociedad ha realizado un interesantísimo trabajo en los últimos años y de la mano de un magnífico técnico, caso de Imanol Alguacil, busca destronar al Atlético como el perseguidor de los dos grandes, algo, que, de momento, está logrando al ocupar la tercera posición de la tabla clasificatoria.

El conjunto vasco es una prueba de oro para calibrar al Almería de Rubi que en casa ha demostrado no tener miedo a nadie. Pero el rival de hoy parece estar a otro nivel, dominando múltiples facetas del juego, presentando a piezas tan interesantes y diversas como Merino, Silva o Kubo y llevando el término sinergia a su máxima expresión. Decía Rubi en la previa del encuentro que su equipo debe dar el máximo nivel y para ello parece fundamental rayar al máximo durante los noventa minutos, aguantando en esas segundas partes que tanto le cuestan, sobre todo en condición de visitante.

El buen partido en tierras gaditanas, más allá del gol de Lucas Pérez, invita a pensar en que Rubi dará continuidad al once, si bien Embarba tiene papeletas para ser de la partida. Con la duda de los extremos, el resto de la alineación será la misma si respetan los contratiempos de última hora en forma de molestias. Salvo sorpresa mayúscula, no será titular Luis Suárez, que tendrá sus primeros minutos en el segundo acto después de ser inscrito este sábado, movimiento en el que el Almería tuvo que dar de baja a Milovanovic al tener cubiertas todas las fichas.

Hablaba también Rubi en la previa de la importancia de rayar a un gran nivel defensivo, haciendo hincapié en las vigilancias ofensivas, algo a lo que el plantel rojiblanco le ha dedicado muchos minutos durante el parón liguero. La Real Sociedad destaca por su fútbol de posesión, orquestado por los Illarramendi, Silva y Merino, pero también por saber contragolpear incluso por ser el equipo que más disputas gana de Primera División. También podría decidir el enorme fondo de armario que dispone Imanol Alguacil, que espera que su equipo no se desordene en la presión rival.

El técnico vasco no puede contar ni con el sancionado Brais Mendes ni con los lesionados Turrientes, Carlos Fernández, Sola y Sadiq, lista a la que se une Cho tras no recuperarse de sus dolencias. Sin embargo, tal es el potencial de los donostiarras, que las ausencias parecen un tema menor. En caso de ganar, el Almería sería el segundo mejor local (por detrás del Barcelona) de toda la categoría, sin haber ganado nadie más que él; pero la Real busca ser el tercer mejor visitante (por detrás del Real Madrid y Barcelona), después de haber logrado cinco victorias en siete desplazamientos. También lucha contra las estadísticas: nunca ha ganado en el Mediterráneo, con dos triunfos locales y otras tantas igualadas.