Unicaja Costa de Almería comenzó 2021 con una más que sufrida victoria en su visita a la cancha de Melilla Sport Capital (2-3), el que será su primer rival en la Copa del Rey que se disputará el próximo mes de febrero y ante el que se impuso con mucho trabajo este domingo en el retorno liguero. Después de sufrir dos derrotas consecutivas en la competición liguera para cerrar el año 2020, ambas frente a los dos primeros clasificados (Teruel y Guaguas) por el mismo resultado de 1-3, los de Manolo Berenguel necesitaban regresar a la senda de la victoria en esta fase regular de la Superliga para demostrar que el equipo está totalmente preparado para afrontar este tramo clave del curso.

Los de Manolo Berenguel recibirán el próximo fin de semana a Rotogal Boiro en el Moisés Ruiz

Con Colito de vuelta, los ahorradores sabían perfectamente que tendrían que estar al cien por cien en el Javier Imbroda para llevarse el duelo y, además, mandar un mensaje de autoridad a los melillenses de cara a su futuro enfrentamiento copero. Tras una primera manga muy disputada, Unicaja Costa de Almería hizo subir el 0-1 en el marcador con un resultado de 19-25. Tomó fuerza el cuadro almeriense y fue una apisonadora en el comienzo de la segunda manga (4-10), aprovechándose de los errores de un rival desconcentrado que empezó a reaccionar en el tramo clave (18-20) pero que acabó muriendo en la orilla en su intento de remontar un segundo asalto en el que los verdes harían el 0-2 (22-25). 

Colito al saque.

Muy igualado comenzó un tercer set donde Melilla tomó la iniciativa, pero no pudo distanciarse de un cuadro foráneo liderado por Colito al saque y un gran Iribarne que buscaba no alargar más de la cuenta la contienda. Los almerienses se mostraron muy férreos en defensa y pusieron tierra de por medio con el 15-19, pero un parcial de 5-0 de los locales puso contra las cuerdas en la recta final a un equipo verde que tendría que ir al cuarto set tras perder este finalmente por 25-23 (1-2).

De tener el partido en su manos, Unicaja Almería empezó a ver que los anfitriones respiraban ya sobre su nuca. Crecido por el 1-2, Melilla arrancó muy fuerte la cuarta manga (9-1), con un Javier Monfort como bestia negra de los ahorradores, que estaban regalando el duelo en este asalto que perdieron por un ajustado 26-24 (2-2). Todo quedó para un tie break en el que los de casa estuvieron muy motivados y los verdes más cabizbajos, lo que hizo ir a remolque (8-4) a un conjunto ahorrador que afortunadamente se hizo con el choque por 2-3 (14-16).