No fue el partido deseado por Adri para volver al primer equipo. El lateral del filial tiene mucho más recorrido del que mostró en la tarde de ayer, pero la pésima trayectoria del B influye tanto en motivación como en estado de forma y eso se notó ayer sobre el césped del Estadio de los Juegos Mediterráneos. No es desentonase dentro de lo que fue el partido de la Unión Deportiva Almería, pero se le vio sin demasiado fuelle y sin confianza cuando llegaba al área de Manolo Reina.

La consigna del equipo de Gorosito fue buscar más la derecha que la izquierda, el míster confiaba en que Michel hiciera daño por su banda y guardar la ropa por la banda de Adri. La baja de Dubarbier era importante, muy importante dado que el argentino estaba siendo de los mejores en las últimas jornadas. Adri Castellano le puso voluntad en defensa, de hecho por allí no entró nadie con peligro, pero debió percutir mucho más en ataque.

Sin embargo, su zurda se quedó en unas ocasiones corta y en otras demasiado largas. Sus primeras llegadas fueron peligrosas, sorprendiendo en el dos contra uno con Juan Ramírez, pero los balones no le llegaban a Quique porque se les iba al segundo palo. A partir de ahí, empezó a buscarlos al primer palo y fueron demasiados fáciles para la defensa tarraconense. De hecho, en los dos últimos antes de su cambio pudo sacar mucho más petróleo el Almería, puesto que estaba Uche preparado para rematar, pero el cuero no le llegó.

En lo que se refiere a su aportación defensiva, el del filial cumplió sin demasiados problemas. El Nástic lo buscó constantemente, aunque Adri cerró sin demasiados problemas. Estuvo rápido al corte y por alto fue bien. Su único despiste llegó segundos antes de que fuera sustituido, cuando dejó de mirar el balón, el Nástic sacó rápido de banda y Emaná le ganó bien la espalda. Ahí se acabó su participación y el flojo partido del Almería de ayer.