La petrolera Cepsa logró un beneficio neto de 680 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 49% más que en el mismo periodo de 2016, gracias a los altos márgenes de refino y a la actividad química y comercial, según informó ayer la compañía.

Si se eliminan los elementos no recurrentes y se calcula la variación de inventarios a coste de reposición, el resultado neto ajustado fue de 692 millones, un 86% más que en el mismo periodo de 2016.

La compañía propiedad 100% del grupo Mubadala Investment Company destacó que la solidez de su negocio de química y de las actividades de comercialización, así como los programas de inversión de los últimos años para mejorar la eficiencia y conversión de las refinerías, y la reducción de la estructura de costes, han permitido mejorar los índices de productividad y sus resultados en este periodo, "pese a que los nueve primeros meses del año se han caracterizado por un entorno de bajos precios del crudo y debilitamiento del dólar frente al euro". Así, este incremento de resultados con la consiguiente generación positiva de caja ha permitido continuar fortaleciendo la liquidez y la posición financiera de la compañía, reduciendo la deuda neta hasta los 1.800 millones.

Por áreas de negocio, la de exploración y producción mejoró de forma significativa gracias a la recuperación del precio del crudo y logró un beneficio de 106 millones, frente a las pérdidas de 10 millones que tuvo en el mismo periodo del año anterior.

El negocio de refino y comercialización alcanzó un beneficio de 496 millones de euros, un 64% más, y el de química de 86 millones, un 12% más.

Por el contrario, el resultado del área de gas y electricidad cayó un 3%, hasta los 30 millones de euros, perjudicado por el exceso de oferta en el mercado de gas natural.

La producción de crudo de Cepsa ascendió a 88.100 barriles al día en los nueve primeros meses del año, un 1% más, y comercializó 10,9 millones de barriles. El margen de refino se situó en 7,8 dólares por barril frente a los 5,2 de 2016. En los nueve primeros meses del año se destilaron 115,5 millones de barriles de crudo.