Minutos antes de empezar la actuación, el público ya se encontraba impaciente, y desde las primeras filas se podía escuchar como gritaban su nombre. Un poco después, las luces se apagaron despertando el grito de muchos ante la emoción del momento. Entonces apareció Vanesa Martín en el escenario, acompañada por su banda, y empezó la magia.

El primer tema con el que dio comienzo el espectáculo fue 'Nunca me conoció', y en el que la artista estuvo acompañada para darle vida por la legión de fans que se dieron cita en el recinto ferial.

"Muchísimas gracias una vez más por acudir a la llamada de Munay, de este disco, y por acompañarnos. Os animo a que bailéis y cantéis y que de repente sintáis la necesidad de expresaos a través de estas canciones. Lo que quieran que remuevan en cada una de vuestras vivencias y experiencias. Pero sobre todo, disfrutad de esta noche que es nuestra". Con estas palabras se dirigió la artista malagueña a los allí presentes, que siguieron al pie de la letra sus palabras.

Melodías accesibles pero trabajadas desde la sencillez menos ampulosa, una manera propia de contar historias interpersonales, en el punto en el que la razón alcanza la madurez de saber aprender a llevar las heridas del amor y una voz que, dosificada entre la modulación pop y los alardes líricos, se ha convertido en una de las más apreciadas del momento, son algunos de los ingredientes que no muchas veces coinciden en el mismo artista y que han convertido a Vanesa Martín en una estrella popular en los últimos años.

La cantautora malagueña, además, derrochó simpatía y cercanía, en la noche del jueves, en el tercero de los conciertos de la Feria de Almería, en el espacio del recinto ferial, organizado por el Área de Cultura, Educación y Tradiciones del Ayuntamiento de Almería. La noche estuvo impregnada irremediable por el romanticismo y la sensibilidad de sus letras que llegaron a los corazones de todos los presentes en el recinto.

Vanesa Martín estuvo acompañada para este gran espectáculo por los artistas Alberto Miras al piano y dirección musical; Daniel González "Taketo" en el bajo; Joaquín Calderón a la guitarra, violín y coros; Jose Marín a la guitarra y coros; y Manuel Reina a la batería, que pusieron el broche de oro.