Tamara Falcó vuelve a estar enamorada. El afortunado que llena el corazón de la futura nueva marquesa de Griñón (cuando se formalice todo el papeleo burocrático) se llama Iñigo Onieva, tiene 31 años, es madrileño, diseñador de coches y hermano de la actriz Alejandra Onieva.
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A Tamara no se le conocía novio tras su relación, en la primavera pasada, con Iván Miranda Álvarez-Pickman, el biólogo suizo de 41 años con el que salió tres meses. Tal como informan ¡Hola! y Vanitatis, Tamara ha recuperado la ilusión en un año marcado por las muertes en su familia. Fuentes cercanas a la familia Preysler informan que la relación con Onieva, ocho años mayor que ella, avanza poco a poco pero segura.
"Tamara está muy ilusionada y enamorada", aseguran. Ambos se conocen desde hace bastante tiempo por amigos comunes, pero su relación no se afianzó a nivel sentimental hasta después del pasado verano. Fue durante los meses de desescalada por la pandemia cuando comenzaron a verse, y a salir juntos con más asiduidad.
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Su entorno más cercano conoce sobradamente esta relación. Se asegura que Iñigo ha sido para Tamara, en estos difíciles meses de pérdidas, un importante pilar y apoyo. Hay que recordar que tras la muerte de su padre, Carlos Falcó, a principios de la pandemia, en septiembre fallecía repentinamente su cuñado, Jaime Carvajal, y a las pocas semanas, su tío, el marqués de Cubas.
Según apunta ¡Hola! la nueva pareja ya compartió a finales de enero, entre amigos, una escapada a la localidad de Guadalupe, en Cáceres. El motivo era el cumpleaños de Luisa Bergel, íntima amiga de la hija de Isabel Preysler. De momento, ninguna de las partes ha confirmado su relación.
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