Casi parece un paradigma de la lucha de superación y de romper barreras, tal y como realiza el colectivo de personas con discapacidad. La sexta exposición ‘Carteles para un Gallo Pedro’ ha cerrado sus puertas en un año en el que, pese a que no todos los almerienses han podido verla de manera presencial debido a las restricciones sanitarias derivadas de la contención del Covid-19, sí se ha podido disfrutar a través de un cómodo formato digital (https://bit.ly/3o624pf). Un nuevo ejemplo sobre cómo superar las trabas en el camino para conseguir el objetivo.

El acto de clausura de esta exposición sí ha sido presencial, cuidando las normas de seguridad establecidas, y ha contado con la presencia de las tres entidades participantes en esta consolidada iniciativa formativa, cultural y artística: la Asociación de Personas con Discapacidad Verdiblanca, el Ayuntamiento de Almería, a través de su Área de Familia, Igualdad y Participación Ciudadana, como organizadores del certamen de cortometrajes Gallo Pedro, y la Escuela de Arte de Almería, cuyo alumnado realiza cada año un ejercicio interpretativo para plasmar en carteles de creación propia algunas de las películas presentadas al concurso.

La edil municipal, Paola Laynez, califica la simbólica clausura como “un día más de inclusión, porque gracias a Verdiblanca, que lo organiza todos los años, es un certamen donde se mezcla la cultura y se hace partícipe al alumnado de la Escuela de Arte. Es una manera más de llegar a esa inclusión para que nuestra ciudad sea cien por cien accesible y que las personas con diversidad funcional consigan tener las mismas oportunidades que los demás y tener la mejor calidad de vida posible”.

El presidente de Verdiblanca, Antonio Sánchez de Amo, destaca que “estamos muy agradecidos por la colaboración permanente que tenemos para organizar el Festival Inclusivo de Cortometrajes Gallo Pedro por parte de ambas instituciones, de los agentes sociales y de otros estamentos de la ciudad como la Escuela de Arte. Un año más, como han venido haciendo desde el principio, su alumnado está muy implicado en esta exposición, superándose cada año en sus creaciones. En este caso, por la pandemia, la exposición no ha podido abrirse al público de manera presencial, pero sí de manera virtual en una sala de exposiciones recreada en un espacio habilitado para que los más de 20 trabajos puedan ser disfrutados por cualquier persona”.

Por último, en representación de la Escuela, su vicedirectora, Isabel Ibáñez, da las gracias a Verdiblanca y al Ayuntamiento “por acordarse de nuestro alumnado, que ya lleva muchos años colaborando y estamos dispuestos a seguir los venideros. Es honor para el alumnado participar en una iniciativa como esta porque se pone en valor su trabajo y ve su recompensa al verlos expuestos al público”.