Con bicicletas diminutas y dos personajes humorísticos, el Parque Municipal acogió una representación de la compañía Circortito que volvió a traer el teatro a la calle.

El público se fue sentando en la hierba del parque para disfrutar del espectáculo en un auténtico día de verano.

Los personajes salieron a escena subidos en dos bicicletas pequeñas y empezaron a hacer diferentes números con este transporte de pequeño tamaño.

Los artistas se mezclaron con el público y realizaron distintas escenas en las que se caía encima de alguno de los asistentes lo que suscitó las carcajadas del resto de personas que estaban en el Parque Municipal.

Los artistas también demostraron su destreza en el trapecio y sorprendieron con su fuerza al público que acudió a ver la obra.