El Patio de Luces fue anoche el escenario escogido para el regreso de la obra de Capuleto a la capital almeriense tras 19 años. El Palacio Provincial acogió la inauguración de la primera parte de la exposición Capuleto: Vivir por la pintura. Un acto que contó con la presencia de la diputada de Cultura, María Vázquez; el director del Museo Casa Ibáñez -y comisario de este proyecto-, Juan Manuel Martín Robles; Jorge y Francisco Capulino-Pérez, hijos del pintor; así como su viuda, Lucía Jaramillo.

Capuleto: Vivir por la Pintura es un homenaje al pintor que va a constar de un libro catálogo y dos exposiciones; la primera la que ayer fue inaugurada y la segunda la que acogerá el Centro de Arte Museo de Almería del 27 de Noviembre al 14 de Enero.

La exposición cuenta con un total de 32 de obras que el pintor realizó entre los años 1936 y 1969. Esta selección permitirá conocer los inicios de un pintor cuyas búsquedas y experimentaciones le llevarán, sin perder nunca su marcada personalidad y su interés por la humanización de la pintura, a cambiar de registro con facilidad.

El comisario de la exposición destaca lo importante que es este proyecto por la selección de las obras, muchas jamás han sido expuestas, y por lo que significa la figura de Capuleto en la Historia del Arte.

Juan Manuel Martín Robles agradece el apoyo institucional que ha recibido la Fundación para que este proyecto sea una realidad y ha asegurado que "marcará un antes y un después en el conocimiento y reconocimiento de Capuleto". "Los jóvenes podrán conocerle y todos aquellos que disfrutaron de él podrán volverlo a hacer".

Esta exposición tampoco hubiera sido posible sin la familia. Asimismo, asegura que la muestra cuenta con obras de 24 colecciones privadas que llevan años sin ver la luz pública. Una muestra excepcional.