FRUIT Attraction, la feria agrícola de Madrid que finalizó hace unos días, ha servido para confirmar las buenas perspectivas que el sector hortofrutícola de la provincia tiene de cara a la campaña que ahora se inicia. Aunque el término campaña cada vez está más superado, en un sector que mantiene producción todo el año o la busca en otras latitudes para cumplimentar y satisfacer a los clientes, lo cierto es que la guerra de Ucrania y sus consecuencias inflacionistas dejan en Almería un poso de excelentes posibilidades y opotunidades que, ojalá, se cumplan. Los altos precios del gas y la electricidad dejan maniatados a los holandeses, competencia directa de Almería, y abre de par en par las puertas a la producción, más barata pese a los incrementos de costes, de esta tierra. Fruit ha destacado por la confirmación permanente de las grandes comercializadoras de clientes, para cerrar en la medida de lo posible contratos, y asegurarse que las hortalizas de Almería no falten en los lineales de los supermercados y grandes superficies de Europa. Esto tiene un precio y, por suerte para los agricultores, elevado.
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