Cada año, desde que alcanza la memoria, el jueves de la mitad de la cuaresma los pueblos del Levante Almeriense salen al campo a celebrar el Día de la Vieja. Una fiesta en la que la protagonista es una vieja fabricada con cañas o maderas y papel de colores que esconde caramelos en su interior. Es un día de convivencia, contacto social, buenos alimentos y diversión. Algo que la situación actual de confinamiento por el coronavirus hace completamente imposible.

Por ello, algunos ayuntamientos, asociaciones y vecinos de la comarca han lanzado diferentes propuestas para poder “disfrutar” de esta fiesta desde casa. Una forma de mantener viva la tradición y mantenerse distraídos, sobre todos los más pequeños, en estos momentos de reclusión domiciliaria. La imaginación al poder.

El Ayuntamiento de Antas, que fue el primero en pedir en un bando la suspensión de la fiesta al aire libre (antes de declararse el estado de alarma), ha animado a sus vecinos a celebrar el Día de la Vieja desde las ventanas y balcones. Ha publicado en las redes sociales un vídeo en el que explica cómo se puede fabricar una vieja con los materiales que hay en casa, sin necesidad de tener que comprar nada. Así, a las 12:00 de este jueves se deben sacar las viejas a las ventanas y balcones, como símbolo de esta celebración, y que permanezcan allí durante todo el día. “Queremos que no se apague el espíritu de la vieja, a pesar del estado de alarma, y dar ejemplo de cómo un pueblo unido no se frena ante nada”, explican.

Otra iniciativa original es la del Ayuntamiento de Los Gallardos. “Vamos a celebrar nuestro primer, y esperamos que último, Día de la Vieja virtual”, ha anunciado en Facebook. La idea es que este jueves los vecinos elaboren su vieja con los medios de los que dispongan en casa y “con mucha imaginación”. Después, pueden enviar una foto por Whatsapp (al número de teléfono 692140105) para elaborar un álbum que se publicará el viernes en el perfil municipal. Una forma divertida de pasar el que será el sexto día de cuarentena, y hacer más llevadera la jornada a los pequeños. “Con iniciativa, ánimo, imaginación y extremando las precauciones, juntos saldremos”, anima el Consistorio gallardero.

Día de la Vieja en Casa, promovido por el Ayuntamiento de Los Gallardos.

Los ayuntamientos de Mojácar y Turre también se han unido a la celebración de este Día de la Vieja 'indoor' y han pedido a sus vecinos fotos para publicar a través de las redes sociales.

Otra alternativa para quienes estén cuarentenando en una casa amplia, con terrazas o jardín, es la celebración del Día de la Vieja en estos espacios. Algunas personas ya han anunciado en las redes sociales que, como todos los años, partirán la vieja, aunque sea en la terraza. Y es que muchas personas ya habían elaborado esta especie de piñata en las semanas previas al estado de alarma. Otros, las habían comprado en alguno de los comercios de la comarca levantina que ofrecen este producto artesanal.

¿Recuperar la fiesta cuando vuelva la normalidad?

Y es que el Día de la Vieja no es solo un momento de diversión entre familiares y amigos. También es una fuente de solidaridad, por ejemplo para la Asociación para la Promoción de las Personas con Discapacidad Intelectual (Asprodalba). Cada años elaboran cientos de viejas en su centro ocupacional, que luego venden en su propia tienda del centro de Vera y en otros comercios colaboradores. El dinero que recaudan repercute en el día a día de la asociación. “Este año se han quedado sin vender unas 250 viejas”, cuenta Francisco Alonso, presidente de Asprodalba. Por ello, cree que sería una buena idea recuperar esta fiesta cuando todo vuelva a la normalidad. “No solo sería bueno para Asprodalba, sino que para toda la comarca sería una buena forma de celebrar la vida y el fin de estos malos momentos”, explica.

María Luisa termina de elaborar su vieja para celebrarla en casa.

¿Qué se celebra en el Día de la Vieja?

Se trata de una de las tradiciones más emblemáticas y autóctonas de la comarca del Levante Almeriense. Ese día, desde bien temprano, los campos y playas de Vera, Garrucha, Mojácar, Turre, Antas, Cuevas del Almanzora, Los Gallardos y Pulpí se llenan de familias y amigos que se disponen a pasar la jornada comiendo, bebiendo y celebrando. Y, si en el grupo hay niños, no puede faltar la vieja, que esconde en su interior golosinas y caramelos.

El origen de esta celebración es incierto. Existen diversas teorías, aunque la mayoría coinciden en señalar su origen pagano, como una fiesta de la primavera, que debido a la buena climatología se adelanataría unas semanas respecto a otros lugares. Según estos estudios, se celebra el cambio de año estacional, del frío al calor, y por ello se "parte la vieja", un muñeco realizado con cañas o maderos, trapos y papel de seda. La vieja simboliza, siempre según esta teoría, lo antiguo, el año que queda atrás y que se rompe para dar paso a un tiempo nuevo.

Hay quien defiende que esta fiesta tiene su nacimiento en la orden de los franciscanos, y que la introdujeron en el Levante a través de Cuevas del Almanzora, a donde llegaron tras las expulsiones de los moriscos y la repoblación con ciudadanos de los reinos conquistadores. Así, esta jornada supondría un día de alivio en el duro y exigente ayuno al que estaban sometidos los cristianos durante la cuaresma. El Día de la Vieja estaba permitido salir al campo y comer todo lo que quisieran.

Lo tradicional en este día es acudir al campo, o la playa, según la costumbre del municipio, para comer productos típicos como habas, tortillas de patatas, bizcochos y postres caseros, y el hornazo, una especie de pan dulce alargado, con una trenza que encierra un huevo duro, y que elaboran muchas panaderías exclusivamente para este día.

Este año, será un Día de la Vieja diferente. Pero si algo queda claro es que, en estos momentos difíciles, la originalidad no está en cuarentena.