La declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) para el complejo hidráulico del Carcauz por parte de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía, reclamada por el Ayuntamiento de Vícar en su última sesión plenaria, por unanimidad, implicará que esta construcción pasará a ser de dominio público.

Esta es una de las consecuencias de la declaración de BIC. Así, un particular puede ser propietario de un BIC, pero la Administración es quien protegerá el valor artístico, histórico, espiritual del bien. Otra de las derivadas que implica el BIC es la necesidad de autorizaciones para cualquier obra o modificación, tanto en bienes inmuebles (edificios) como muebles (una pintura por ejemplo. Es decir, se necesitará autorización para restaurar una pintura y autorización para pintar la fachada de un edificio BIC.

También conlleva la obligación de facilitar inspección, visita pública e investigación si el BIC es de propiedad privada, el dueño deberá facilitar su visita determinados días al mes (normalmente 4. Por ejemplo, en un castillo propiedad de un Conde, este deberá abrirlo al público ciertos días al mes, previamente acordados con la Administración. El dueño de un BIC puede tener ciertos privilegios fiscales, en forma de ayudas para su mantenimiento, restauración

Los BIC son inseparables de su entorno e inexportables y eso incluye los bienes muebles (pinturas, joyas), que es ilegal sacarlos del país. Desde la incoación del expediente se pueden parar las licencias de obras. En el caso de los inmuebles, es obligatorio redactar un plan especial o protegerlos con cualquier otra figura del planeamiento.

El complejo hidráulico de Carcauz es una joya escondida en la falda sur de la Sierra de Gádor que recoge la huella que el Imperio Romano. Se trata de sistema hídrico cuya construcción responde a la necesidad de riego para una importante superficie de campo, con otros usos complementarios del agua a la actividad agrícola, como la de ser aportar energía a molinos.

Su declaración como BIC vendría a cerrar una reclamación histórica, ya que forma parte del patrimonio del municipio. Este complejo fue creado para traer agua para riego desde un nacimiento junto a la Rambla de Carcauz hasta una balsa ubicada tras el cerro “Cuerno Toro” llamada “Balsa del Molinero o del Molino, toda vez que hubo un molino funcionando hasta la década de los 70 que se servía del agua traída a través de sus canalizaciones” según recuerda la Asociación Acción por Almería.

Según esta Asociación conservacionista, “hay constancia documental de la existencia de este sistema hidráulico desde el siglo XVI, aunque investigadores como Antonio Gil Albarracín, Juana María Rodríguez López o Lorenzo Cara Barrionuevo han sugerido en sus propias publicaciones un origen romano de este complejo, si bien el paso del tiempo ha obligado a realizar reformas sobre el mismo, ya sea por riadas, movimientos sísmicos o inestabilidad del terreno, ya que las acequias discurren por una pronunciada ladera”.

Este complejo es conocido en el senderismo como el itinerario desde Felix. “Merece un mínimo de mantenimiento para asegurar su estabilidad, y si se pretende explotar como un recurso patrimonial establecer unos mínimos de señalización y protección hacia el mismo” reclaman desde este colectivo.

En 2011, el Ministerio de Cultura incluyó la Iglesia de San Benito en el Registro de Bienes de Interés Cultural. Conocida como Iglesia Fortaleza de Vícar, es un edificio religioso con elementos defensivos, de arquitectura mudéjar que fue construida en la segunda mitad del siglo XVI. En 1568 y como consecuencia de la rebelión morisca en las Alpujarras, sufrió un gran deterioro, siendo reformada en 1647, con elementos mudéjares de par y nudillo.