Luz verde a la subida del IBI en Almería capital con el bloque de la oposición en contra

El Ayuntamiento de Almería ha consumado, con su aprobación plenaria reglamentaria, la subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (el IBI o la contribución), sin obtener el Partido Popular, eso sí, el beneplácito de la oposición, cuyos representantes han respondido en bloque de forma negativa a este incremento, al que han acompañado de una retahíla de descalificativos sin atender a las justificaciones alegadas por la portavoz de María Vázquez.

A la concejal del PP Ana Martínez Labella le ha tocado la papeleta de defender la subida del tipo de gravamen sobre la base imponible del IBI que, en la capital almeriense pasará, con su aprobación en el Pleno, del 0,485 a 0,610, lo que implicará pagar 72 euros más, de media estimativa, por recibo. “A nadie le gusta subir los impuestos, pero gobernar es tomar decisiones y las hay bastante difíciles”, reconocía en una de sus intervenciones Martínez Labella al objeto de ensalzar la obligatoriedad del Ayuntamiento de la capital en la adopción de esta medida fiscal ante una coyuntura económica nacional en la que todo sube por la inflación, con el encarecimiento también de los servicios municipales públicos o el coste de los materiales de las obras. “La inflación afecta todas las casas y a esta también”, y el incremento del IBI le aportará al erario público un ingreso extra para hacer frente a los 12 millones más que, según las cuentas del equipo de gobierno, le costará al Ayuntamiento servicios como el de la recogida de la basura, la iluminación o el mantenimiento de parques y jardines, sin necesidad de meter tijera a las prestaciones contratadas.

"Tope moderado"

“Éramos de las ciudades más bajas en el tipo impositivo y hemos llegado a un tope moderado y nos quedamos en la media nacional”, añadió a Martínez Labella junto al compromiso –esta vez ante el Plenario– de bajar la contribución en cuanto la situación económica lo permita.

Pero estas explicaciones y compromisos, como ya se presumía, poca utilidad han tenido para la portavoz municipal del PP a la hora de convencer de la medida al resto de las bancadas del Salón de Plenos. Desde el “sablazo”, “chantaje” y “saqueo” de la coalición de izquierda Con Almería hasta el “estacazo impositivo” empleado por Vox, pasando por el “fraude electoral” que encuentra el PSOE entre los compromisos del PP enl as pasadas elecciones.

“Pretende saquear a las familias que ya sufren la inflación” mientras, ha recordado el portavoz de Con Almería, Alejandro Lorenzo, “rechazaron subir el IBI a la Iglesia católica”. En opinión de Vox, el PP ha hecho valer en esta sesión “su rodillo impositivo de la mayoría” para “esquilmar el bolsillo de los almerienses” siendo, en palabras de Juan Francisco Rojas, la coyuntura económica “la excusa del mal gobernante” cuando, a su juicio, antes habría que suprimir “los gastos superfluos y evitar la sensación ciudadana de que trabajan para pagar la fiesta de los políticos”.

Convencida de que esta subida del IBI tiene por causa la “nefasta gestión del PP” y el peso de más de 30 millones de euros de las sentencias del paseo marítimo sobre las arcas municipales, la portavoz del Grupo Socialista ha encontrado otros canales de ingresos. Adriana Valverde ha sugerido el empleo de los más de 18 millones de superávit, las derechos pendientes de cobro que ha monetizado en más de 62 millones o cobrar a las concesionarias que acumulan canon, entre las que el PSOE ha citado a Aqualia, empresa concesionaria que, según la portavoz socialista, no paga desde el año 2018.

El IBI y su subida planeó a lo largo del resto de puntos de la sesión plenaria, aprovechando Martínez Labella el empleo de la palabra para apuntalar sus respuestas dadas con anterioridad en el turno correspondiente. “El fraude electoral tiene nombre y apellido, Pedro Sánchez, que perdona a Cataluña 15.000 millones de euros. Si esa cantidad se divide entre todos los españoles son más de esos 72 euros de la subida de la contribución para los almerienses”, sentenció.