En la mañana de ayer se realizó el acto protocolario de colocación en Roquetas de Mar de la primera piedra de la que será la primera iglesia ortodoxa rumana de España, tras un largo proceso que comenzó con la cesión municipal de un terreno de casi 1.500 metros cuadrados para la construcción del templo en las cercanías del parque acuático Mario Park, en la zona de Las Salinas.

Se prevé que esta obra esté terminada en un plazo de dos años contando con la financiación del gobierno rumano y las aportaciones de sus fieles. La inversión prevista es de unos 700.000 euros.

En septiembre de 2008 el ayuntamiento roquetero tramitó el expediente administrativo para la adjudicación de la concesión sobre los 1.330,90 m2 procedentes de un inmueble municipal con destino a la construcción de este centro religioso, por el procedimiento abierto de adjudicación. Se reunió la mesa de contratación a fin de proponer la adjudicación del contrato de acuerdo con lo informado por el técnico municipal, sobre las posibles ofertas recibidas para la realización del mismo. La única oferta presentada fue la realizada por Emil Ioan Somodean, en representación de la Iglesia Ortodoxa Rumana-Parroquia Bautismo del Señor, ofertando un canon anual de seiscientos euros.

La Iglesia Ortodoxa Rumana es una de las iglesias integradas en la comunión ortodoxa. Pertenecen a ella la mayoría de los rumanos. Por el número de sus fieles (20 millones entre Rumanía, Moldavia y la diáspora), es la segunda de las iglesias ortodoxas autocéfalas, sólo por detrás de la Iglesia Ortodoxa Rusa.

Hay que recordar que recientemente el alcalde Gabriel Amat recibió al delegado de inmigración del gobierno rumano Petre Roman ya que Roquetas de Mar es el segundo municipio de España (tras Castellón de la Plana) en inmigrantes rumanos en proporción al número de habitantes totales, siendo unos 10.000 los censados entre los más de 80.000 habitantes empadronados en el municipio.

Petre Roman Vallejo, de madre cántabra, analizaba entonces la situación de los inmigrantes rumanos en el municipio roquetero.

Amat afirmó que se sentía "satisfecho y orgulloso de la gente que había decidido libremente venir a nuestro municipio a trabajar en una época de su vida". Por su parte, el delegado del gobierno rumano agradeció la cálida acogida que los roqueteros y la administración local tienen con sus compatriotas, cifrando en más de 800.000 los rumanos que viven en toda España en la actualidad, "produciéndose una ola de emigración rumana muy parecida a la que hubo desde España en los años 1960 y 70. Tengo que decir que prácticamente no hay quejas de mis compatriotas respecto a las autoridades españolas, algo magnífico para nosotros, aunque lógicamente hay muchos problemas con el desempleo".

Aquél encuentro fue calificado por ambas partes como muy positivo dentro de la política de integración de inmigrantes que mantiene el ayuntamiento roquetero. Gabriel Amat afirmó que "son roqueteros más y no puede haber diferencias ni con unos ni con otros". En aquella cita, tanto el ayuntamiento roquetero como la delegación rumana intercambiaron regalos como expresión de mutua amistad y colaboración. El consistorio recibió fotografía histórica de campesinos rumanos del año 1875, mientras que Amat entregó al miembro del gobierno rumano una placa y cerámica típica almeriense.