La puesta en escena ya avisó al ISE Costa de Almería del potencial de las gallegas, que se mantenían por delante al ecuador del cuarto (7-8). Con la motivación de enfrentarse al equipo que lideraba la tabla invicto, las rojillas apretaron en defensa dejando durante 5 minutos sin anotar a las visitantes, aunque sin lograr despegarse del todo (15-8). La entrada en pista de Adams dio aire a un CB Arxil que recortó al final de primer periodo (18-13).

Las defensas y las imprecisiones volvieron a aparecer en un segundo cuarto muy intenso entre dos conjuntos que intentaban buscar su sitio en la cancha, pero que no anotaban con fluidez (22-13). Adams volvió a hacer daño desde el exterior y las visitantes recortaron de nuevo. Pero ISE Costa de Almería no se descompuso. Tenía controlado su juego interior y Maqui D’Urso y Garrido seguían haciendo daño desde fuera. Al descanso se llegó con 31-25 tras el tercer triple de Irene Garrido.

A la vuelta, las rojillas volvían a tomar ventaja (35-25). Controlaban el rebote y eso les permitió mantenerse delante aunque seguían perdiendo demasiados balones. Además, el trabajo que hicieron todas en defensa fue descomunal, frenando toda opción ofensiva del conjunto pontevedrés que mantenía un porcentaje de tiro bajísimo. Al último cuarto, las almerienses se imponían por 43-33.

En los diez minutos finales, las de Alex Gómez se mantuvieron firmes, llevando la iniciativa y manteniendo el ritmo y la intensidad desde el comienzo (51-35). Las visitantes no conseguían serenar su juego y las rojillas les obligaban a tirar desde lejos, con un horrible 1/19 desde el triple. María Cueto y Méndez tomaban el relevo anotador de Garrido y las distancias se incrementaban (58-41). El conjunto almeriense siguió mostrando serenidad y eso le llevó al triunfo, dando una exhibición defensiva en una tarde no tan acertada en ataque. Finalmente, la victoria y el liderato provisional se quedaron en casa y las almerienses se impusieron con holgado 65-45.