Las plantas sevillanas de Airbus acumulan carga de trabajo. Por un lado, Airbus confirmó ayer que el el Ministerio de Defensa serbio ha ordenado dos unidades del modelo militar C295, que se fabrica en las instalaciones de San Pablo. Y por el otro, la fábrica de Tablada, junto con la de Cádiz, se hacen con la responsabilidad de fabricar parte del Eurodrone, el nuevo avión miliar no tripulado del gigante aeronáutico europeo.

Coincidiendo con la visita del presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, a España, ayer se firmó en Madrid el contrato de estos dos aviones.

“Este contrato irá acompañado de un acuerdo de supervisión de Gobierno a Gobierno entre los Ministerios de Defensa de España y la República de Serbia, que tiene como objetivo estudiar el desarrollo de futuros programas de defensa entre ambas naciones”, afirmó Airbus en un comunicado, en el que la empresa añade que “se compromete a mantener y fomentar su estrecha colaboración con la República de Serbia.

La Fuerza Aérea serbia, que ya opera las soluciones militares de Airbus, se convierte así  en el 33º país que  opera con el modelo militar de origen sevillano.

Los dos aviones adquiridos tendrán configuración de transporte y estarán equipados con la moderna suite de aviónica Collins Aerospace Pro Line Fusion, detalló la compañía. La previsión es que las entregas de los C295 comiencen a finales de 2023.

Por otro lado, el consejero de Transformación Económica, Rogelio Velasco, confirmó ayer que parte de la carga de trabajo del proyecto europeo de construcción del Eurodrone, en el que participan España, Alemania, Italia y Francia, se adjudicará a las plantas que Airbus tiene en Andalucía. 

Pese a ello, fuentes de Airbus explicaron a Efe que todavía no se ha adjudicado la carga de trabajo porque se está pendiente de la firma del contrato entre Airbus y la Organización Conjunta de Cooperación en materia de Armamento con la industria europea, que representa a los cuatro países impulsores del programa multinacional para el diseño, desarrollo y producción de un Sistema Aéreo Tripulado Remotamente (RPAS), que asciende a 7.100 millones. España participa con el 23% en este proyecto.

Las demás naciones miembros del programa Eurodrone ya habían aprobado sus respectivos presupuestos, por lo que con la luz verde dada por el Gobierno español se podrán materializar los contratos de producción.

El avión tiene una longitud de 16 metros, una envergadura de 30 metros y una altura de 6 metros; alcanza una velocidad máxima de 500 kilómetros por hora; está ideado para tener una autonomía de entre 18 y 40 horas, y se estima que el programa Eurodrone genere unos 7.000 puestos de trabajo de alta tecnología en la Unión Europea.