La misa que conmemoraba los 24 años de Monseñor Adofo González Montes como obispo se convirtió en todo un plebiscito hacia su gestión. Varios ejemplos a tener en cuenta en la celebración y que han podido pasar desapercibidos. El primero fue cuando terminó la homilía. Se produjo un aplauso de parte de los sacerdores existentes, en torno a una veintena de ellos, y sin embargo la nueva cúpula de la Diócesis, siguió en sus respectivos bancos, pero sin ejercitar las manos. El segundo tuvo que ver con la asistencia. Pocos párrocos en ejercicio y algunos más de los jubilados.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios