Un equipo de investigación alemán ha podido observar, por primera vez, la explosión de una estrella parecida a nuestro Sol consumiendo todo su combustible. El fenómeno se ha logrado ver gracias al observatorio de rayos X eROSITA, cuyos resultados detallados se van a publicar en la revista Nature.
Astronomers have spotted the X-ray flash that precedes a nova. The brief flare is the first sign of a white dwarf erupting into a nuclear-fusion fireball.https://t.co/sfWi8tvaMy pic.twitter.com/bt1Z4tAaqc
— Sky & Telescope (@SkyandTelescope) May 11, 2022
Qué son las novas
Se pueden definir como estallidos estelares imprevisibles que aparentemente aparecen como lo que se entiende como 'nueva estrella del cielo'.
El origen se encuentra en la acumulación de material procedente de una estrella con similar tamaño al sol hacia lo que se conoce como la estrella compañera o 'enana blanca'.
Las novas son explosiones causadas por la combustión termonuclear en las envolturas compuestas por hidrógeno de estas 'enanas blancas' en el proceso de creación.
En la superficie de la enana blanca, existen condiciones extremas, las cuales provocan que el material acumulado en la superficie acabe explotando y sea expulsado al espacio como una explosión termonuclear.
El material se expande rápidamente, y esto es lo que hace que ocurra un aumento de la magnitud visible de la estrella. Esto se puede observar desde la Tierra como una 'nueva estrella en el cielo'.
El proceso en una explosión estelar
Las fases iniciales ya se habían previsto de manera teórica: las altas temperaturas de la exposición termonuclear es lo que hace que se produzca el fenómeno de 'bola de fuego inicial'
Durante los días posteriores a la explosión, la expansión de la bola provoca una disminución de la temperatura que hace que evolucione hacia una esfera de gas mucho más frío.
En general, se puede decir que todo el proceso de la bola de fuego, es muy breve y se da horas antes de la aparición de la estrella en el cielo. Todo esto quiere decir, que llegar a detectar los rayos X antes del descubrimiento, es algo muy complicado.
Durante el segundo mapeo del cielo que se realizó el 7 de Julio de 2020, se detectó una nueva fuente de rayos X muy brillante que tuvo una duración inferior de ocho horas.
Una semana más tarde, se descubrió en la Tierra y en luz visible la exposición de la Nova Reticuli 2020, localizada a una distancia de 2.500 parsecs (unidad astronómica que corresponde aproximadamente a 3 años de luz)
Cómo evoluciona la galaxia
El estudio que se realiza de las exposiciones de nova permite encajar algunas de las piezas de la evolución química que toma lugar en la galaxia y de la distribución de elementos químicos que se producen en nuestro sistema solar.
La observación desde grandes telescopios terrestres, junto con el estudio que se realiza de las emisiones de los rayos X, permiten reconstruir los procesos detallados que ocurren en los fenómenos explosivos y su contribución de la evolución de la galaxia.
La bola de fuego, pieza clave
La detención de la bola de fuego inicial predicha por lo modelos, ha sido clave para ajustar y comprobar las teorías de las explosiones estelares de nova.
No solo esto ha permitido ajustar y comprobar las teorías, sino que ha servido como elemento clave de estudios para Universidades como FAU, el MPA, la UPC, y el IEEC que han participado en este estudio junto a otras como la Universidad de Tübingen y el Leibniz Institute for Astrophysics Potsdamde Alemania.
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