Satisfacción es la palabra que resume la celebración de la Feria de Adra en su edición de 2013 en honor a la Virgen del Mar y San Nicolás, que echó el cierre ayer después de cinco intensos días de fiesta en los que la diversión no ha decaído ni de día ni de noche. La participación ha sido la tónica dominante en todas las actividades incluidas en el programa festivo elaborado por el Ayuntamiento de Adra para el disfrute de sus vecinos y visitantes. Una programación que ha permitido disfrutar de un total de 45 actividades. La asistencia quedó de manifiesto, por ejemplo, en el clásico encierro de San Nicolás en el que participaron 3.000 personas.

Esta actividad, que ha cumplido su octava edición desde que se recuperase, comenzó a las 12 de la mañana con el disparo de tres chupinazos, que fuero lanzados por parte del párroco de la Iglesia de la Inmaculada Concepción, Antonio Manzano, otro por parte de la hermana mayor de la Hermandad de la Virgen del Mar y San Nicolás de Tolentino, Concepción Peña, y el último por el alcalde de Adra, Enrique Hernando.

A partir de ese momento y con una Puerta del Mar completamente abarrotada de niños y padres, seis toros (cabe explicar que son de goma espuma) comenzaron el encierro por la carrera de Natalia Rivas hasta la Fuente del Mar, donde se había colocado la plaza de toros hinchable para la llegada de los astados.

Allí los más pequeños pudieron lidiar con los seis toros. Durante todo el recorrido, los toros hicieron las delicias de los más pequeños, que ataviados con camiseta blanca y pañuelo de color rojo, corrieron el VIII Encierro de San Nicolás.

Otra de las actividades destacadas en la jornada final de Feria fue la santa misa y posterior procesión del Santo Patrón, San Nicolás de Tolentino. Estos actos litúrgicos dieron comienzo a las ocho de la tarde y estuvieron presididos por Antonio Salvador, párroco de Nuestra Señora de la Encarnación de Cuevas del Almanzora.

La misa estuvo cantada por la Coral de la Virgen del Mar de Almería y la procesión contó con el acompañamiento musical de la banda de música Ortiz de Villajos. Además, como es tradición hubo bendición y reparto de panecillos. El patrón bajo el amparo de miles de fieles recorrió las principales calles del casco antiguo de la ciudad.