En las entrañas del Estadio de Gran Canaria la sensación que quedó entre periodistas y futbolistas de ambos equipos después del partido es que el empate era justo. Las Palmas se había mostrado más vertical, pero el Almería había pegado en los momentos oportunos. Lucas Alcaraz no quiso cambiar esta opinión en su comparecencia de prensa, pero sí que dejó claro que él pensaba que los puntos se venían para casa después de que Ulloa hiciera el segundo tanto de los rojiblancos.

"Hemos sido capaces de ponernos en dos ocasiones por delante y pensábamos que íbamos a ser capaces de lograr la victoria. Ellos han acumulado mucha gente arriba y nos han dado espacio para montar contras, pero las hemos llevado muy mal", y defendido peor los ataques grancanarios: "Las Palmas tiene un poderío importante por alto, nos ha ganado por centímetros. El primer gol ha sido una falta de atención nuestra, pero el segundo le da con la nuca y entra".

El técnico granadino se marchó satisfecho de que su equipo fuera capaz de competir ante un rival en racha, pero no está contento por no reencontrarse con la victoria. "Ha sido un partido muy largo y hemos sabido sufrir. Las Palmas venía de encadenar varios resultados muy positivos y nos ha exigido mucho. Hemos podido ganar en el área rival, pero empatamos en la nuestra", reflexionó el entrenador rojiblanco que por lo menos ve cómo el Elche no les ha recortado puntos: "No nos hemos acercado al Celta, pero mantenemos la diferencia con el séptimo. Siempre tenemos la autoexigencia de ganar, pero lo bueno es que nos mantenemos arriba pese a una racha no excesivamente buena".

Antes de salir de la sala de prensa y volver a sumergirse en los modernos y funcionales pasillos del estadio, todos con wifi y sillones para que trabajen los medios de comunicación, Alcaraz explicó el cambio de Corona: "Me lo pidió antes de descanso y traté de esperar por si mejoraba. Tuvimos que hacerlo y cambiamos el dibujo con Abel", finalizó.